Tras un profundo examen, la Armada Española ha optado por reparar el cazaminas Turia, el buque que quedó encallado frente a las costas de La Manga (Murcia) en las labores de rescate del piloto Francisco Marín, muerto tras sufrir un accidente aéreo. Las labores de recuperación de la nave contarán con un presupuesto de 25 millones de euros.
Según las estimaciones de la Armada, este desembolso es "ligeramente inferior" al que supondría la compra de un nuevo buque de condiciones similares. El Turia quedó gravemente dañado tras encallar el pasado mes de agosto y estuvo a punto de hundirse frente a La Manga.
Las labores de la Armada se centraron en mantener la flotabilidad de la nave y trasladarlo a un puerto seguro. Ahora, medio años después y tras un profundo análisis, se ha optado por reparar el buque pese a los elevados costes derivados de la operación.
La Armada Española siempre ha manifestado su preferencia de reparar el buque por "razones operativas". Y tras estudiar el equilibrio entre el desembolso y las capacidades de la nave se ha dado luz verde a Navantia para que repare el buque.
Las obras, a partir del segundo semestre
Las obras comenzarán a partir del segundo semestre de 2020. Terceras empresas prestarán apoyo en la reparación del casco de fibra de vidrio.
"La Armada siempre consideró necesario mantener el número de cazaminas con los que contaba, por tratarse del mínimo imprescindible para realizar las misiones que tiene asignada la Fuerza de Medidas Contra Minas, de alto interés estratégico para la defensa de nuestros puertos", detalla el cuerpo en un comunicado.