Lo que iba a ser otro “acto político de precampaña electoral” para insistir en que las elecciones catalanas del 27 de septiembre “son un plebiscito” para los independentistas, se convertirá en una sesión en la que Artur Mas deberá explicar los últimos registros de la Guardia Civil relacionados con la supuesta financiación ilegal de comisiones de Convergència Democràtica de Cataluña (CDC). Al menos, así lo dejarán patente en sus intervenciones los grupos de la oposición en el Parlament, cuando este miércoles por la tarde tengan en frente al presidente y candidato Mas.
Desde CDC dicen que "Mas dejará muy claro que no hay pruebas de los supuestos cobros"
“El President debe dar explicaciones sobre si conocía o no las supuestas comisiones del 3% o más que percibía la fundación y la propia Convergència de empresas, como la constructora Teyco, a cambio de contratos de obra pública”, explica un dirigente del PSC a Vozpópuli en Barcelona.
Los socialistas catalanes le preguntarán a Mas si tenía algún tipo de conocimiento de la financiación de CDC, por medio de su fundación Catdem, supuestamente a través de estas comisiones. Este debate extraordinario se produce después de que el viernes pasado un juez de El Vendrell (Tarragona) ordenara a la Guardia Civil varios registros en la sede de CDC en Barcelona, cinco ayuntamientos gobernados por CiU y el domicilio del extesorero de la fundación nacionalista.
Mas defiende que CDC recibió donaciones no comisiones
Como respuesta a esta petición de aclaraciones, desde Convergència aseguran a este diario que “el President dejará muy claro que no hay ninguna prueba que demuestre los supuestos cobros irregulares para financiar a CDC y que esas aportaciones de empresas como Teyco no eran comisiones por obtener obras públicas de los ayuntamientos gobernados por CiU, sino donaciones”, explican las mismas fuentes convergentes.
Así, la comparecencia de Mas no se produce a petición propia, sino como una aportación específica que amplía el orden del día para el President en la Comisión y que han reclamado los grupos de la oposición para que dé cuenta de las investigaciones sobre el presunto cobro de retribuciones por parte de CDC.
Mas no hablará por voluntad propia, sino por las peticiones de PP, PSC, Ciudadanos, Unió y ICV-EUiA
Para posibilitar esta sesión específica se han puesto de acuerdo Unió, PP, Ciudadanos, ICV-EUiA y el PSC en su petición de comparecencia del máximo mandatario en Cataluña en relación a los registros de la Guardia Civil en la sede de Convergència y de su fundación, CatDem.
"Total disponibilidad a atender las solicitudes de esclarecimiento que se han formulado. Así lo ha comunicado Mas al grupo de CiU para que puedan trasmitirlo al resto de grupos y que se someta a las preguntas y consideraciones que se estime oportuno", según relatan fuentes del gobierno de la Generalitat.
Por su parte, tanto el PP como Ciudadanos, por un lado, y PSC e ICV-EUiA, por el otro, registraron sendas peticiones de ampliación del orden del día de la comparecencia de Mas. El líder de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, hizo un llamamiento tanto a CDC como a ERC para que se sumen a esta solicitud.
La comparecencia de Mas molesta a ERC
Lo que sí está claro es que la comparecencia de Mas por presunta corrupción política molesta a los socios independentistas de ERC que van juntos en la lista electoral Junts pel Sí con su presidente Oriol Junqueras.
Si ya fue incómodo para los republicanos cuando tenían un pacto de estabilidad en esta legislatura -a principios de año Mas tuvo que responder sobre Jordi Pujol y su familia por el denominado 'caso Pujol' que investigaba políticamente el origen de la riqueza no declarada a Hacienda durante décadas por éstos-, ahora, la candidatura de Junts pel Sí les obliga a unir su destino al de la presunta corrupción de Convergència.
