Casi la mitad de los catalanes (un 47,9%) votaría en contra de la independencia de Cataluña de celebrarse hoy un referéndum sobre la ruptura con España, cuatro puntos más que los que lo harían a favor (un 43,7%) según un sondeo que publica este sábado La Vanguardia. La encuesta, realizada por Feedback entre el 27 y el 29 de abril pasado a partir de mil entrevistas, revela que por primera vez desde septiembre del 2012, el No a la independencia se impondría en un eventual referéndum sobre el encaje de Cataluña en España y refleja que alrededor del 80% de los catalanes respaldaría la celebración de una consulta popular para decidir esta cuestión.
Más del 60% de los catalanes creen que no se puede poner en marcha una negociación para llegar a la independencia si no la apoya una mayoría clara
Sólo entre los votantes del PP y Ciudadanos son mayoría quienes se oponen a la celebración del referéndum independentista, aunque un tercio de los electores populares y casi un 43% de los de C's la respaldan e incluso un 72% de los votantes del PSC apoyan la convocatoria. El muestreo indica asimismo que más del 60% de los catalanes creen que no se puede poner en marcha una negociación para llegar a la independencia si no la apoya una mayoría clara (o al menos la mitad más uno) de los votos de los ciudadanos.
Por su parte, sólo el 24,4% de los encuestados aceptarían que el proceso para llegar a la independencia pudiera ponerse en marcha con el exclusivo apoyo de la mitad más uno de los diputados del Parlamento catalán (68 sobre 135) y aunque no contasen con una mayoría absoluta de votos en las elecciones, en tanto que el 43% reclama los dos tercios que requiere la reforma del Estatuto o de la Constitución española. Según el sondeo, el acuerdo alcanzado entre CiU, ERC y las entidades soberanistas para llegar a la independencia de Cataluña lo rechaza el 49% de los encuestados y lo aprueba el 40% y entre los que estarían en contra, son más los simpatizantes del partido que lidera Artur Mas que los del que encabeza Oriol Junqueras.
En cuanto al papel que podrían desempeñar los nuevos partidos políticos como Podemos o Ciudadanos de cara a una solución negociada del conflicto, más del 80% de los entrevistados opinan que la formación de Pablo Iglesias no "modificará nada sustancial" y el 70% piensan que la de Albert Rivera seguirá las directrices actuales del Gobierno del PP.