"A los padres les pesa cada día y más si cabe este aniversario". Son las duras palabras a Vozpópuli de Alicia Redondo, la abogada que representa a la familia de Álex, el niño asesinado hace un año en Lardero (La Rioja) durante una fiesta de Halloween. El presunto homicida, Francisco Javier Almeida, se encuentra en el Centro Penitenciario de Segovia. Pretende pasar desapercibido y tiene vigilancia para evitar que sea agredido.
Hace un año, el crimen de Lardero sacudió los cimientos del poder judicial y penitenciario. Ocurrió la tarde del 28 de octubre de 2021 cuando Álex estaba jugando con varios amigos en un parque disfrazado de la "niña del exorcista", con motivo de Halloween. Sus padres estaban celebrando con conocidos una fiesta en las proximidades. Almeida se acercó al menor, al que confundió con una chica, y le engañó para que subiera a su casa para enseñarle unos cachorros.
Cuando uno de los padres se dio cuenta de la ausencia de Álex, fueron a buscarle por las inmediaciones. Uno de ellos fue el que encontró a Almeida con el cadáver del niño en sus manos. Dijo que se había "desmayado". Según las investigaciones de la Guardia Civil, el menor murió asfixiado.
Vigilancia estrecha a Almeida
Desde que fue detenido y pasó a disposición judicial se encuentra en la prisión de Segovia. Es la tercera etapa que afronta en la cárcel y no ha cambiado su forma de ser. "Parco en palabras, tímido pero extremadamente educado", explican fuentes penitenciarias a Vozpópuli.
No mantiene relaciones estrechas con otros presidiarios y trabaja en silencio en sus labores cotidianas. En sus dos entradas anteriores llegó a ser preso de confianza, algo que ahora no se ha producido. Lo que sí tiene Almeida es una vigilancia estrecha en su celda para que no pueda ser agredido por otros inquilinos a consecuencia de la gravedad de las acusaciones.
La última imagen que se tiene de Almeida data del juicio de su primer homicidio. Es verdad que su físico se ha deteriorado con el paso de los años y que cuando fue citado a declarar ante los tribunales lo hizo por videoconferencia. Ha ganado peso y ha envejecido. No se hizo pública su imagen.
Juicio durante el primer trimestre de 2023
El Juzgado de Instrucción número 2 de Logroño ya tiene prácticamente terminadas las diligencias. Los últimos pasos de este caso fue el reconocimiento forense que se le realizó al presunto asesino. No se apreció ningún trastorno. Ahora solo queda que la defensa de Almeida presente su escrito. El último trámite.
Una vez se cumplimente este informe "toda la maquinaria" comenzará y podría celebrarse el juicio durante el primer trimestre de 2023, una vez que se conforme el jurado de la Audiencia Provincial de La Rioja, según pronostica Redondo a Vozpópuli, quien también representa en este proceso a la Asociación Clara Campoamor, como acusación popular.
Un homenaje en el aniversario del asesinato de Álex
En recuerdo de Álex este viernes se ha organizado una concentración homenaje en la Plaza Entre Ríos de Lardero. Será a las 20.30 horas. Como es habitual la familia no acudirá. No quieren protagonismo público. Llevan el aniversario de este duelo en silencio.
"Todos los días son terribles. Cuando se cumplen fechas señaladas se vuelve mucho peor. Se vuelve a remover todo. Cada día les pesa y este año les pesa mucho más. El estado anímico es igual o peor que ese día", señala la letrada que les representa.
"Se podría haber evitado". Fueron las escuetas pero contundentes declaraciones de la familia de Álex, tras conocer el historial delictivo de su asesino. Francisco Javier Almeida tiene el perfil de un sociópata, según las fuentes policiales consultadas. Cuando se confirme la fecha del inicio del juicio, la familia tiene claro que solicitará la "prisión permanente revisable" para que este hombre "no vuelva" a pisar la calle.
El historial asesino de Almeida parece sacado de una película de terror ya que ha pasado gran parte de su vida en la cárcel. Cuando salía volvía a delinquir de la forma más atroz e inimaginable.
El crimen de la inmobiliaria
Su primer delito lo cometió en 1989 cuando tenía 22 años. Retuvo y abusó de una menor de 13 años en Logroño. Almeida fue detenido y condenado a siete años de cárcel. Solo cumplió cuatro y abandonó la penitenciaría en 1997.
Al año de estar en la calle perpetró un brutal y terrible asesinato el 17 de agosto de 1998. Tenía 31 años. Ese día abordó a una joven agente inmobiliaria con la excusa de visitar un piso. La mujer fue hallada con 16 heridas de arma blanca por diferentes parte del cuerpo, entre ellas en sus partes íntimas, y una mortal en el corazón.
Por este crimen fue condenado a 30 años de prisión. Recibió la libertad condicional en abril de 2020, más de un año antes del terrible crimen de Álex. En este periodo disfrutó de 38 permisos penitenciarios desde el 2013. A pesar de su historial y su carácter, cumplía con los requisitos para disfrutar de esta condición.
En Lardero, Almeida se hacía llamar Pachi, entre sus pocos conocidos, y trabajaba para una empresa de limpieza especializada en la reinserción laboral de presos. En sus primeras solicitudes para disfrutar de la libertad condicional la junta de tratamiento de la prisión de El Dueso (Cantabria) expresó sus dudas al respecto.