En 2013 los nacimientos cayeron por quinto año consecutivo, con tan sólo 425.390 nuevos niños, un 6,4% menos que un año antes y un descenso que desde 2008 ya supera el 18 %, lo que refleja el progresivo envejecimiento de la población, informa Efe. Esta es la radiografía demográfica de España que aporta la estadística Movimiento Natural de la Población e Indicadores Demográficos, difundida por el Instituto Nacional de Estadística (INE), según la cual la población envejece y se reduce sin que se produzca el número de nacimientos necesarios para que tomen el relevo y sostengan el sistema.
El descenso de los nacimientos, el menor número de hijos por mujer, el aumento de la edad media a la que éstas tienen su primer hijo y el menor número de mujeres en edad fértil, define la situación y da una amplia visión de cuál puede ser el futuro demográfico del país. Así, los últimos datos no son nada halagüeños y muestran que el crecimiento vegetativo de la población, es decir, la diferencia entre los nacimientos y las muertes, se redujo un 30,7% en 2013 hasta situarse en 36.181 personas, el saldo más bajo desde el año 2000.
A pesar de estos datos, el número de defunciones cayó un 3,3%, la tasa de mortalidad infantil se situó por primera vez por debajo del 3 por mil (2,8) y la esperanza de vida es la mayor de la serie histórica con 82,8 años (80 años para los hombres y 85,6 para las mujeres). Según los datos del INE, desde 2008, cuando nacieron 519.779 niños (el máximo en 30 años), el número de nacimientos se ha reducido un 18,1%. Como consecuencia, la tasa bruta de natalidad (número de nacimientos por cada mil habitantes) ha descendido hasta 9,1 desde los 9,7 de un año antes, y mantiene la tendencia decreciente iniciada en 2008.
Cae el número de hijos por mujer
El descenso de los nacimientos se debe a la menor fecundidad, es decir del descenso del número de hijos por mujer que, en 2013, se situó en 1,26 (1,32 en 2012) y a la progresiva reducción del número de mujeres en edad fértil. De hecho, según explica el INE, el número de mujeres entre 15 y 49 años comenzó a reducirse en 2009 debido a que llegan a ese rango de edades generaciones menos numerosas, nacidas durante la crisis de natalidad de los 80 y primera mitad de los 90.
Además, el aporte que la inmigración exterior ha estado haciendo a la natalidad durante el periodo de expansión económica se ha reducido en estos últimos años como consecuencia de la crisis económica que les ha obligado a retornar a sus países de origen, o a reducir el número de hijos. En España, la edad media a la que las mujeres tienen su primer hijo continua aumentando y, en 2013 se situó en 32,2 años (32,7 las españolas y 29,7 las extranjeras), frente a los 31,6 de 2012.
El descenso de la fecundidad se apreció tanto entre las extranjeras como en las españolas y en ambos casos, el indicador se redujo seis centésimas hasta 1,21 hijos por mujer española y 1,50 hijos por mujer extranjera. De los 425.390 nacimientos del pasado año, 78.942 fueron de madre extranjera (18,6 % frente al 19,2 % de 2012).
El pasado año murieron en España 389.699 personas, un 3,3% menos que en 2012 con lo que la tasa bruta de mortalidad se situó en 8,3 defunciones por mil habitantes, frente a los 8,6 de 2012.
Menos bodas, y más adultas
Según el INE cada vez son menos los que se casan y más mayores. Así, en 2013 contrajeron matrimonio 155.098 parejas, un 8 % menos, lo que reduce la tasa bruta de nupcialidad a 3,3 matrimonios por mil habitantes, mientras que la media se situó en 37,3 años para los hombres y 34,1 para las mujeres. En el 18,1 % de los matrimonios celebrados con cónyuges de distinto sexo, al menos uno de ellos era extranjero.
Del total de matrimonios registrados, un 2% (3.102) correspondieron a parejas del mismo sexo. Por comunidades autónomas, el número de nacimientos se redujo en todas y los mayores descensos se dieron en Asturias (12,5%), Navarra (9,9%) y La Rioja (8,9%). El número de defunciones también se redujo en todas y sólo aumentó en la ciudad autónoma de Ceuta.