El principal acusado en el 'caso Gürtel', Francisco Correa, para el que la Fiscalía Anticorrupción pide 110 años de cárcel, se ha confesado en un escrito que publica eldiario.es y en el que asegura que cobraba comisiones a los empresarios contratados para realizar obra pública.
El dinero que les solicitaba era el trámite necesario para la adjudicación de los proyectos, rondaba entre el 2% y el 3% del importe de la concesión y Correa se lo entregaba en efectivo al extesorero del PP, Luis Bárcenas, que lo contabilizaba en una caja B y luego distribuía en sobres a distintos dirigentes del partido.
Asegura Correa en su confesiój que este comportamiento con los empresarios de obra civil venía siendo habitual desde 1996, cuando el PP, liderado entonces por José María Aznar, ganó las elecciones generales por primera vez. "Bárcenas se encargaba de los políticos y yo de los empresarios", dice el acusado en los nueve folios mecanografiados que ha remitido al diario digital.
El escrito relata además la financiación, en 2003, de la segunda campaña popular en Madrid, "la del Tamayazo", que no corrió a cuenta del PP madrileño, sino de Fundescam, presidida hasta 2010 por la hoy líder de la oposición en el Ayuntamiento de la capital, Esperanza Aguirre.
Llegada a Valencia
El texto de Correa continúa relatando otro escándalo, el del aterrizaje en 2004 de la trama Gürtel en la Comunidad Valenciana: "Álvaro Pérez conoce en un mitin a Francisco Camps, con quien establece buena relación, lo que nos hace ver la posibilidad de trabajar con el PP de Valencia. Para ello se abrió una pequeña estructura y se creó Orange Market".
A partir de entonces, el Gobierno valenciano concedió varios proyectos a Orange Market, con el mismo sistema de cobro de comisiones operativo en Madrid en los tiempos de Aznar. "Se nos concedió Fitur, una parte de la visita del Papa (subcontratado) por parte de la Generalitat por mandato expreso de Camps, y pequeños contratos (Open de tenis, etc...). Sin embargo, hacíamos todas las campañas y mítines del PP", explica.
Correa y bárcenas lo niegan y Catalá dice que no tiene fundamento
En un comunicado emitido al programa El Intermedio de La Sexta, Correa declara que "jamás he redactado ni entregado ninguna confesión propia a la Fiscalía Anticorrupción". "Es cierto que el Sr. Escolar ha participado en todo esto porque quería la exclusiva de mi declaración, favorecido por uno de los letrados de las acusaciones populares, con quien mantiene excelentes relaciones, pero nunca le he entregado ningún documento al señor Escolar y mucho menos autoinculpatorio, o que pueda ser utilizado contra los coacusados o terceras personas", ha manifiestado.
Asegura que la información "no es más que "un corta y pega de los escritos de acusación que, con razón, cuando los abogados que tan mal me asesoraron lo llevaron a la Fiscalía, ésta les contestó que no contenía nada nuevo". Correa reconoce en el escrito haber sido "objeto de un mal asesoramiento por parte de algunos Letrados" que le incitaron a obtener una sentencia de conformidad con la Fiscalía Anticorrupción. "Lamento mucho haberles hecho caso porque detrás de ello solo estaba la trampa en la que ahora me encuentro".
Por su parte, el extesorero del PP Luis Bárcenas Báacusado ha negado "rotundamente" la veracidad de las "supuestas" confesiones del considerado cabecilla de la trama, Francisco Correa, que "le relacionarían falsamente -según sus abogados- en unos hechos en los que no ha tenido participación alguna".
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha afirmado que la supuesta confesión del presunto cabecilla de la 'trama Gürtel' tiene "poco fundamento", puesto que lo que pretende es, en el marco de su estrategia de defensa, exculparse o diluir su responsabilidad buscando culpar a otros y sin presentar ninguna prueba.
