La Comisión de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Barcelona ha dado luz verde al primer trámite para crear el dentista social pese a las duras críticas de la oposición y el criterio en contra de los odontólogos de Cataluña.
El servicio sanitario tiene como objetivo atender a 36.000 pacientes al año, pero tan solo cuenta con cuatro dentistas en su arranque, que no será ya hasta el próximo año. El precio de este servicio será de hasta el 50% respecto al precio habitual.
ERC y PSC votan a favor, pero con reservas
Barcelona En Comú, como ERC, CUP y PSC han votado a favor de esta medida, mientras que PDeCat, PPC y Ciudadanos se han posicionado en contra. El dentista municipal tiene como fin cubrir este servicio sanitario para tan solo el 12% de la ciudadanía, es decir, unos 180.000 pacientes en total.
El primer centro se instalará en uno de los barrios con mayores problemas de rentas y empleo, como Sant Andreu, Sant Martí o Nou Barris. Este centro contará tan solo con 23 trabajadores, de los que cuatro son odontólogos.
La medida no cuenta con un estudio de mercado
A partir de este momento se abre el plazo de 30 días para presentar reclamaciones y alegaciones al texto, que se debatirá en el pleno municipal en marzo, tan solo dos meses antes de las elecciones municipales.
Tal y como ya había avanzado el PDeCat a Vozpópuli, la concejal Mercè Homs ha cargado contra una medida "populista", realizada a tan solo cuatro meses de los comicios.
Presentan esto para buscar el titular fácil. Han lanzado una bomba de demagogia de un electoralismo desesperado"
Desde el PPC se ha criticado también la medida demagógica, más cuando las cifras no cuadran. "Presentan esto para buscar el titular fácil. Han lanzado una bomba de demagogia de un electoralismo desesperado", ha cargado el portavoz, mientras que Ciudadanos tilda este proyecto de "electoralista", al tiempo que ha cargado contra Colau por afirmar que la medida sí tenía el respaldo del Colegio de Odontólogos de Cataluña. No obstante, este órgano ha cargado contra la misma en un durísimo comunicado, donde se tildaba la promesa de "publicidad engañosa".
Por su parte, los grupos que han votado a favor de la medida han mostrado sus reservas. El PSC ha apuntado que ni hay un estudio de mercado ni tampoco se tiene el apoyo del Colegio del Consejo Catalán de Salud. ERC, por su parte, ha defendido un mayor consenso y ha emplazado a Colau a "hacer los deberes" para "votar con tranquilidad". La CUP cree que este servicio debería estar incluido en la sanidad pública. "La lucha debe ir más allá de los ayuntamientos para avanzar hacia un sistema de salud universal en todos los ámbitos".