Ciudadanos podría cambiar de nombre en unos meses. En la actual dirección nacional hay voces que apuestan por dar este paso al constatar que la marca que nació hace 15 años está ahora "desgastada" por los sucesivos batacazos electorales desde "la noche del 10-N" y creen que este debate se va a suscitar en la convención política que Inés Arrimadas ha anunciado para julio.
"No hay ningún temor o miedo a afrontar ese debate en la convención", subraya a Vozpópuli un dirigente próximo a Arrimadas, que recuerda que a la nueva Secretaría de Comunicación encomendada al vicesecretario Daniel Pérez se le ha añadido la coletilla "e Imagen Corporativa". Todo un indicio de que la presidenta de Cs sopesa darle un lavado de cara al partido.
El citado cónclave naranja -para el que aún no hay fecha ni lugar- está pensado para "rearmar ideológicamente" al partido naranja, hace hincapié esta fuente, con un "debate de ideas" en el que se quiere apostar más por lo liberal en detrimento del centro, una "palabra refugio" a la que PP y PSOE recurren en cada cita electoral para pescar votantes de Cs.
"El centro no es un lugar para quedar bien con todos", hace hincapié otro miembro del Comité Permanente, que apuesta por subrayar las diferencias ideológicas que la formación naranja tiene, a su juicio, con los populares. "El liberalismo es más que el tipo económico al que recurre el PP. Detrás de esta ideología está el apoyo a la eutanasia, al aborto libre o a la gestación subrogada, por ejemplo. Líneas a las que nunca llegará Casado", resume.
Nombres para el nuevo Ciudadanos
Con esta nueva estrategia se reconoce, de forma implícita, que el lema de la campaña de Edmundo Bal para las madrileñas del 4-M -"Elige centro"- no fue el correcto. Ahora bien, qué nombre darle al nuevo Ciudadanos. Una formación, por cierto, que está inscrita en el registro de partidos políticos del Ministerio del Interior como Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía.
La opción de Partido Liberal está descartada de antemano porque fue una formación surgida en la Transición -en la que militó Esperanza Aguirre, curiosamente- y que luego fue absorbida por la Alianza Popular de Manuel Fraga. Una posibilidad sería 'Ciudadanos Liberales'. O también 'Liberales' a secas.
En todo caso, el debate sobre la nomenclatura no se ha puesto encima de la mesa en ninguna reunión del Comité Permanente, coinciden varios dirigentes consultados por este periódico. Y un paso de este calibre debería contar con el respaldo de la militancia, seguramente mediante una consulta interna tras la convocatoria de un congreso extraordinario.