La líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, ha empezado la nueva legislatura con una medida inédita por parte de un cargo electo en el Parlament. Aupada por el importante ascenso en número de escaños hasta el puesto de principal partido de la oposición, sólo por detrás de la formación independentista Junts pel Sí, Arrimadas ha dado ejemplo al renunciar a los “privilegios” inherentes a su cargo como futura jefa de la oposición cuando se constituya la Cámara catalana a partir del 9 de noviembre y a la espera de ver si la CUP inviste a Artur Mas como presidente reelecto.
Arrimadas también ha reclamado para Ciudadanos una de las vicepresidencias de la Mesa del Parlament al ser la segunda fuerza tras el 27-S
La futura diputada del partido “naranja” ha renunciado a los pagos estipulados por el Parlament en lo que se refiere a un aumento salarial y a un coche oficial a su disposición. Fuentes parlamentarias han asegurado a Vozpópuli que el ahorro para las cuentas de la Cámara se sitúa alrededor de los 45.000 euros brutos anuales sumando los costes de ambos conceptos.
Hace dos legislaturas el exconseller socialista Joaquim Nadal también renunció a su plus como jefe de la oposición en el Parlament –en este caso por el PSC-, que se cifró en cerca de 43.500 euros brutos anuales aunque mantuvo su sueldo de diputado, alrededor de 41.000 euros brutos al año. Al margen de esta medida ejemplarizante y en defensa de “la ética en política”, Arrimadas también ha reclamado para Ciudadanos una de las vicepresidencias de la Mesa del Parlament al ser la segunda fuerza tras el 27-S. Según ha podido saber este diario, Ciudadanos ha mantenido contactos en los últimos días con otros partidos para la configuración de la Mesa del Parlament sin que haya un acuerdo por el momento.
La estrategia de Ciudadanos
Desde esta nueva posición, la estrategia de la líder de Ciudadanos pasará por liderar una oposición "constructiva", buscando el diálogo y el consenso con todos los partidos de la cámara catalana para que haya un "acuerdo de mínimos" sobre cuestiones como los servicios públicos, la regeneración democrática o la lucha contra la corrupción. En esta línea, Inés Arrimadas entregó a PSC, PPC y Catalunya Sí que es Pot un documento con diez compromisos, sobre el que todavía no ha obtenido respuesta, aunque espera que se posicionen esta misma semana, después de haber mantenido un contacto con estos tres partidos el pasado viernes.
La dirigente de Ciudadanos ha reiterado que Cataluña se encuentra en una situación de "incertidumbre" tras las catalanas, y ha advertido a la CUP de que si incumple su promesa hecha en campaña de no investir a Artur Mas "deberá explicárselo" a sus votantes, como también el presidente de la Generalitat en funciones deberá hacer lo propio si pacta con "un partido como la CUP". En relación a las negociaciones entre las formaciones independentistas catalanas Junts pel Sí y la CUP –que suman 72 escaños de un total de 135- para la investidura del presidente de la Generalitat, Arrimadas ha lamentado que "el futuro de los catalanes esté en manos de la CUP" y ha recordado que la única promesa de la formación independentista durante la campaña fue que "no haría a Mas presidente".