La sustitución de Ximo Puig al frente del PSPV se encamina hacia la celebración de un proceso de primarias que puede abrir unas heridas internas que los 8 años de ejercicio del poder habían aliviado. La ejecutiva nacional prevista para el próximo lunes marcará el calendario congresual (finales de febrero o de marzo) y a partir de ahí cualquiera que reúna el 2% de los avales de militantes y afiliados directos puede presentar su candidatura.
Hasta esa reunión del lunes sólo queda una posibilidad de avanzar hacia una candidatura de 'consenso' y es la Conferencia Política que tendrá lugar en La Coruña. Pedro Sánchez sigue decantándose por la ministra de Ciencia y Universidades, Diana Morant, como la figura que debe guiar al socialismo valenciano en los próximos años.
Presión interna
Establecer una imposición de Morant frente a cualquier aspirante es algo que descartan en Ferraz. Los métodos de persuasión de la dirección federal a nivel interno son "numerosos", según las fuentes consultadas por Vozpópuli en el PSOE.
Recuerdan, a modo de ejemplo, que Alejandro Soler, secretario general provincial de Alicante (y uno de los aspirantes) es diputado nacional, cuestión que podría "arriesgar" a futuro si se enfrenta a los deseos de Sánchez.
La presión entre bambalinas para que no se presenten candidaturas alternativas a la que oficializará (casi seguro) Morant "se está produciendo" aseguran las mismas fuentes. En público, sin embargo, desde Ferraz y desde los círculos que apoyan a la ministra –como los seguidores de Ximo Puig– se alude a las palabras del secretario de Organización, Santos Cerdán, sobre que se "respetará que decida la militancia".
No hay acercamiento
Los avances para una candidatura de unidad en la presente semana han sido inexistentes. Es más, según ha podido conocer este medio, la posibilidad de que el proceso de primarias se acabe celebrando finalmente son ahora más elevadas.
Las conversaciones que han tenido lugar así lo indican. El entorno de Diana Morant no está dialogando con el del secretario general provincial de Valencia, Carlos Fernández Bielsa, que se ha mantenido en un segundo plano hasta la fecha.
Sí lo han hecho, por contra, con el equipo de Alejandro Soler sin resultado positivo. Igualmente, los 'contactos' entre el entorno de Fernández Bielsa y el de Soler han resultado infructuosos.
El mismo objeto de deseo
Los tres quieren liderar el partido y hacen números para ver quién tiene la delantera e intentar persuadir a sus inminentes adversarios de que no den el paso de presentar su candidatura a la secretaría general del PSPV que estará en juego en el congreso extraordinario cuya fecha debe fijar la ejecutiva del próximo lunes.
Morant cuenta con el apoyo de Pedro Sánchez y el de Ximo Puig y sus seguidores. El 'ximismo' no es en sí mismo una familia en el PSPV pero el ejercicio del poder ha aglutinado a un grupo de referentes del partido que le daría presumiblemente la delantera en apoyos.
La ministra –que ha deslizado a sus colaboradores que quiere compatibilizar su tarea en el Gobierno con la de oposición al presidente valenciano, Carlos Mazón– cuenta con que obtendrá el apoyo mayoritario de los militantes de Castellón (gracias a Puig), significativo en Alicante (también por el 'ximismo') y en Valencia existen más dudas de cuál sería su porcentaje final de respaldo, aunque en la ciudad de Valencia y la de Gandia sería muy elevado.
Alejandro Soler garantiza a los suyos que dispone de un control amplio en Alicante, una parte de Valencia que le llegaría a través del exsecretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, y más residual en Castellón.
Carlos Fernández Bielsa dispondría, según una versión bastante extendida, de un elevado apoyo en la provincia de Valencia (la que cuenta con más militantes), escaso en Alicante, y testimonial en Castellón.
La secretaría general es el único botín que desean los tres y es difícil aceptar 'compensaciones' cuando el objetivo es compartido por los tres.
Soler no cede; Bielsa, espera
El primero que, públicamente, ha expresado su deseo de presentarse es Alejandro Soler y todo apunta a que si la 'mediación' de Ferraz no prospera este fin de semana será el primero en dar el paso (ya quiso hacerlo el pasado sábado).
Morant también tiene decidido que, con o sin oponentes, va a presentar su candidatura para liderar el partido e intentar convertirse en la primera mujer que presida la Generalitat Valenciana y, previamente, en la primera mujer que sería cabeza de cartel autonómica del PSPV.
El último en salir sería Carlos Fernández Bielsa que a medida que ha ido avanzando la semana, según comentan a este medio algunos miembros de la dirección provincial, tendría cada vez más claro dar también un paso hacia adelante para representar a quienes le están apoyando como líder provincial (gracias a la alianza que en su día tuvo con Ximo Puig del que hoy está distanciado).
Voto directo y doble vuelta
Los estatutos del PSPV establecen que la primarias, llegado el caso, se realizan "mediante voto individual, directo y secreto de los y las militantes y afiliados directos que tengan plenos derechos políticos".
Las primarias se celebrarían por el sistema de doble vuelta. Si en la primera vuelta hubiera una candidatura que alcanzara más del 50% de los votos válidos ya sería declarado como ganador.
Por contra, si hubiera más de dos candidaturas proclamadas (como parece que puede ser el caso) y ninguna obtuviera más del 50% de los votos válidos en la primera vuelta, "pasarán a la segunda vuelta las dos candidaturas que obtengan el mayor número de votos" en la que el ganador y nuevo ocupante de la secretaría general sería el que "obtenga mayor número de votos".