La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha dicho este jueves que no comparte la opinión mayoritaria de su partido respecto al anteproyecto de ley del aborto ya que es más partidaria de una regulación de plazos en lugar de la de supuestos.
Cristina Cifuentes ha realizado estas manifestaciones en RNE, ha recordado que el texto está en fase inicial y que falta una tramitación parlamentaria en la que puede sufrir modificaciones, y ha recordado que responde al cumplimiento de un compromiso del PP en su programa electoral.
De todas formas, Cifuentes sí cree que hay que modificar "la ley socialista", ya que no comparte aspectos de la misma como que las menores de 16 años puedan abortar sin conocimiento paterno y que también se pueda dispensar como método anticonceptivo la "píldora del día después" sin prescripción médica.
No obstante, ha dicho que personalmente está más de acuerdo con una regulación de plazos, aspecto en el que ha indicado que no comparte la opinión mayoritaria de su partido, aunque ha confesado que "es un tema muy complicado" y que debe aceptar la medida que se ha adoptado.
Preguntada sobre la posibilidad de que sea la próxima candidata del PP a la Alcaldía de Madrid ha asegurado que en el PP no se ha abierto este debate "porque no toca" y ha asegurado que no va a entrar "en esas batallas ni en esas guerritas".
En cualquier caso, ha apostillado: "Si mi partido me dice que tengo que ir a Vitigudino, pues me voy, pues en política no hay que hacer lo que uno quiere sino lo que debe".
Por otra parte, Cristina Cifuentes ha estimado que sería importante que la Ley de Seguridad Ciudadana se aprobara con un amplio consenso de las fuerzas parlamentarias y ha lamentado la "poca voluntad de diálogo" demostrada por el PSOE con sus críticas ya al principio de su tramitación.
Preguntada por el debate independentista en Cataluña ha insistido: "No concibo España sin Cataluña ni Cataluña sin España, pues España necesita a Cataluña y Cataluña necesita a España" sobre todo en momentos de crisis.
Ha advertido de que "la independencia supondría la salida de Cataluña de la Unión Europea y que quedaría fuera del euro, en una situación muy mala".