España

Defensa se arma contra una escalada pandémica: cinco contratos sanitarios en una semana

Mascarillas, cámaras infrarrojas, cápsulas de aislamiento; el departamento dirigido por Margarita Robles y las Fuerzas Armadas se blindan para hacer frente a los nuevos brotes de coronavirus

Mascarillas, cámaras infrarrojas para la detección de temperatura, test PCR, cápsulas de aislamiento, pulverizadores de material desinfectante... La escalada pandémica llama a las puertas del colapso y el Ministerio de Defensa se prepara para hacer frente a la nueva embestida del coronavirus. En la última semana, el departamento dirigido por Margarita Robles y los diferentes cuerpos militares se han lanzado al mercado en busca de material sanitario. Cinco licitaciones con las que blindarse ante un repunte de la crisis sanitaria.

La Plataforma de Contratación del Sector Público recoge la batería de acuerdos suscritos -o en proceso de firmar- por Defensa y por los cuerpos militares. Los diferentes ministerios se lanzaron a la compra de material sanitario tras decretarse el estado de alarma, en un mercado internacional convulso. Ahora, con la segunda oleada en plena vorágine, Defensa y las Fuerzas Armadas son las que han manifestado una mayor actividad: sólo en la última semana han publicado cinco contratos.

"Como consecuencia de la situación creada por la expansión de la enfermedad covid-19 y las medidas dirigidas para el control y contención de la misma, se hace necesario la adquisición de mascarillas quirúrgicas para el personal del Ejército del Aire [...] que se encuentre tanto en territorio nacional como en zona de operaciones". Bajo esa disposición, el Ejército del Aire justifica la adquisición de mascarillas por valor de 445.280 euros, IVA incluido, a la empresa Manzanal Mampel S.L.

La Unidad Militar de Emergencias (UME), que cumplió algunos de los cometidos de desinfección más complejos durante la pandemia -en escenarios como las residencias de ancianos o espacios públicos especialmente transitados- también se ha lanzado a por mascarillas quirúrgicas. En este caso, ofrece un máximo de 42.349,99 euros, impuestos incluidos, en un procedimiento que todavía no se ha adjudicado.

Cámaras infrarrojas y cápsulas de aislamiento

La Armada se ha hecho con un sistema de cámaras infrarrojas de detección de temperatura para descartar la entrada en sus instalaciones de personal con fiebre. El equipo ha supuesto un desembolso de 21.780 euros y la empresa Crossmaglen Dos Ibérica es la encargada de suministrarlo.

El Ejército de Tierra, por su parte, busca varios lotes de productos para hacer frente a la pandemia. Para los termonebulizadores y los nebulizadores -que permiten pulverizar el material desinfectante- cuenta con un presupuesto de 29.040 y 30.250 euros, respectivamente. También busca cápsulas de aislamiento para pacientes (58.080 euros), autoclaves (192.390 euros) y un equipo de calentamiento de paciente por aire forzado (58.080 euros). Todo ello aún está por adjudicar.

Por último, la Inspección General de Sanidad de la Defensa (IGESANDEF) ha adjudicado a Siemens Healthcares Diagnósticos la compra de una cantidad sin especificar de reactivos para hacer las pruebas PCR de detección de coronavirus por un total de 160.000 euros.

Plan de choque

Como contó Vozpópuli, las Fuerzas Armadas trabajan desde marzo en un plan de choque para hacer frente a una segunda oleada de coronavirus. Las previsiones de los expertos se han precipitado y, si bien se creía que los rebrotes llegarían en otoño, lo cierto es que las cifras de contagiados y fallecidos se han disparado de forma alarmante en las últimas semanas.

La adquisición de este material sanitario forma parte de ese plan de contingencia. El Ejército de Tierra también se hizo con respiradores para evitar el colapso que se sufrió durante el estado de alarma, mientras que el Gómez Ulla ha desplegado un hospital de campaña en su aparcamiento en previsión de una escalada de la crisis sanitaria.

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