La dieta de uno de cada cuatro escolares en España depende de los comedores del colegio. De los 8.286.603 millones de alumnos matriculados en las enseñanzas de régimen general durante el curso 2019/2020, el 27,23% eran usuarios de este servicio complementario. En concreto, un total de 2.256.894 menores come en su centro educativo. Sobre todo los de Infantil y Primaria. De acuerdo a los últimos datos publicados por el Ministerio de Educación, del total de usuarios de los comedores, el 88% pertenecen a esas etapas educativas.
La cifra no difiere mucho de la constada hace una década. Durante el curso 2009/2010 el sistema educativo contaba con 7.608.292 alumnos matriculados en todas las enseñanzas de régimen general y 1.926.887 acudía al comedor, lo que se traduce en el 25,32% de los alumnos.
Cerca del 30% de los alumnos matriculados durante el curso 2019/2020 eran usuarios de este servicio complementario. Una cifra que sube ligeramente en comparación con la de hace una década. En pleno debate sobre la obesidad infantil en España, la dieta de los comedores cobra especial relevancia.
Reclamo de las familias
La Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado (CEAPA), que agrupa a más de 12.000 organizaciones, aboga por un servicio de comedor público, de calidad y gratuito para todas las personas que lo necesiten y lo considera esencial para adquirir hábitos saludables y para proporcionar una alimentación sana y de calidad. Desde CEAPA explican a Vozpópuli que llevan años reclamando a las administraciones una cocina propia en cada centro escolar frente al servicio de catering. Ahora, también se han posicionado a favor de la prohibición de publicidad sobre dulces y bebidas azucaradas dirigida a menores de edad que plantea el ministro Alberto Garzón.
Según el estudio Los comedores escolares en España. Del diagnóstico a las propuestas de mejora elaborado Carro de Combate, junto a Del Campo al Cole y SEO, en España existe una tendencia a la generalización del modelo de subcontratación, a menudo a través de la línea fría, por el que empresas abastecen los comedores escolares con platos elaborados en cocinas centrales y distribuidos en bandejas.
Un 63,6% de los comedores tienen 'catering'
Un 63,6% de los centros utilizan servicios externos de catering, mientras que sólo un 36,4% tienen cocinas in situ de acuerdo al informe. Además, sólo un 19% de los centros tenía gestión directa, mientras que el 81% era de gestión indirecta, datos que en este caso correspondiente a ocho comunidades porque, según los autores del análisis, el resto de gobiernos autonómicos no proporcionaron la información solicitada. Además, señalan que el 58% del mercado de restauración colectiva en los comedores escolares del país está en manos de cuatro empresas: Serunion, Compass Group, Aramark y Ausolan.
No obstante, el menú de los comedores escolares habría mejorado considerablemente en los últimos años. Al menos así lo determina una encuesta realizada por la Organización de Consumidores (OCU) en 2018. Los platos nada tienen que ver con los de 2006, aunque aún hay un margen de mejora.
"La mayoría de los menús escolares revisados no respeta las cantidades recomendadas de los distintos grupos de alimentos y más de la mitad de los colegios sirven demasiados hidratos de carbono (arroz, pasta, patatas) y carne, mientras que escasean las legumbres, los huevos, el pescado azul y la fruta. El pan integral está ausente en el 70% de los comedores", concluye.
La media de raciones de verdura (2,79 a la semana) se ajusta a lo recomendado, dice OCU, pero esta se presenta en el 30% de los casos en puré y en el 50% como ensaladas de guarnición. Dejando poco margen para platos de verdura tradicional.
Dieta más saludable que en 2006
El consumo de pescado es el adecuado en la mayor parte de los centros, aunque predomina el blanco sobre el azul. "Los platos precocinados como las croquetas, flamenquines y empanadillas deben estar presentes en los menús de forma ocasional, como máximo dos veces al mes. OCU ha comprobado que un 59% de los colegios se ajustan a estas cantidades, el 70% en el caso de los privados", detalla el informe. En comparación con 2006, sí se incluye más verdura, pescado, huevos y fruta y menos fritura y postres lácteos azucarados que entonces.
Sólo el 12% de los padres consultados por OCU puntúa con mala nota los menús escolares de sus hijos, aunque en general se quejan de la masificación, el ruido y las prisas para comer en el comedor. Para la organización, los menús escolares son una pieza fundamental para que la dieta de los niños sea variada y equilibrada y su contribución es imprescindible para combatir la epidemia de la obesidad infantil y sobrepeso.