Un juez de Barcelona ha citado como investigado al director del semanario satírico 'El Jueves' por un delito de injurias, a raíz de una denuncia por varios contenidos de su revista que vinculaban a los agentes de la Policía Nacional desplazados a Cataluña por el 1-O con el consumo de cocaína.
Según ha informado este viernes el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, el titular del juzgado de instrucción 20 de Barcelona ha acordado citar como investigado al director de 'El Jueves' el próximo miércoles 8 de noviembre, en el marco de sus diligencias previas por un delito de injurias a raíz de una denuncia de la Policía Nacional.
El semanario satírico publicó el pasado 5 de octubre un texto en el que sostenía que "la continua presencia de antidisturbios acaba con las reservas de cocaína en Cataluña", y agregaba: "los cárteles colombianos han advertido de que son incapaces de abastecer tanta demanda".
La continua presencia de antidisturbios acaba con las reservas de cocaína en Cataluña https://t.co/YEP6WokDzU
— El Jueves (@eljueves) October 5, 2017
Ante esta situación, la Policía Nacional reprendió a través de su cuenta de Twitter a El Jueves por este tipo de comentarios: "Apoyamos y defendemos la libertad de expresión, ¿pero no creéis que os habéis pasado de la 'raya'? #RESPETO".
Apoyamos y defendemos la libertad de expresión, ¿pero no creéis que os habéis pasado de la "raya"?#RESPETO https://t.co/pFrt01fsUH
— Policía Nacional (@policia) October 5, 2017
Varios sindicatos policiales anunciaron que denunciarían a 'El Jueves' por el contenido de su publicación en contra de los agentes desplazados a Cataluña.
Paralelamente, según han informado a Efe fuentes policiales, la Policía Nacional está efectuando un seguimiento de los comentarios injuriosos contra el cuerpo en las redes sociales a raíz de su actuación para impedir el referéndum del 1-O, que había sido suspendido por el Tribunal Constitucional.
En los casos en los que se detectan comentarios injuriosos, la Policía los remite a la Fiscalía para que determine si pueden ser constitutivos de un delito de odio, según las fuentes.
