España

Los ex dueños de Marsans podrían ser responsables del 66% de la deuda impagada

La Administración Concursal de Viajes Marsans y el Ministerio Fiscal han solicitado al juez que los antiguos propietarios de la compañía, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, sean considerados responsables del 66% de la deuda que quede insatisfecha una vez que finalice el procedimiento concursal.

La Administración Concursal de Viajes Marsans y el Ministerio Fiscal han solicitado al juez que los antiguos propietarios de la compañía, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, sean considerados responsables del 66% de la deuda que quede insatisfecha una vez que finalice el procedimiento concursal.

De acuerdo con el informe presentado por la Administración Concursal al juzgado que tramita la insolvencia de la compañía, los nuevos gestores y el Ministerio Fiscal han pedido también que Posibilitum Business, actual dueña de la empresa turística, abone el 34% restante de la deuda, según recoge este viernes en un comunicado el despacho Iure Abogados.

Falta de liquidez

El informe subraya la falta de liquidez del grupo y su imposibilidad para hacer frente a los créditos contra la masa, los primeros que se pagan en un concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos). En este sentido, la Administración Concursal incide en que sólo se han pagado únicamente los créditos contra la masa correspondientes a junio de 2010 y señala "la escasa perspectiva de monetización de los activos", según informa Iure.

En consecuencia, sólo se podrán abonar aquellos créditos contra la masa como las nóminas adeudadas a los trabajadores, así como los gastos judiciales y del procedimiento en función de la liquidez de Viajes Marsans. Sin embargo, será complicado que los acreedores ordinarios puedan cobrar el importe que se les adeuda con la liquidación de la empresa.

Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual vendieron sus empresas a Posibilitum Business, controlada por Ángel de Cabo, justo antes de que fueran declaradas en concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) en junio de 2010. El grupo turístico, actualmente en fase de liquidación, tiene un abultado agujero patrimonial que alcanza los 424,4 millones de euros.

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