El goteo de excarcelaciones de presos de ETA no cesa desde que la organización terrorista anunciara, hoy hace cuatro años, "el cese definitivo de la actividad armada". El 20 de octubre de 2011, el día en el que la banda armada hizo público su comunicado, permanecían entre rejas 703 de sus miembros. De ellos, 559 estaban en España. Los 144 restantes, en prisiones de otros países, principalmente Francia. Ahora, sin embargo, esta cifra se ha reducido considerablemente y ya sólo quedan encarcelados 435 miembros de la organización, cerca de un 40 por ciento menos. De hecho, en España la cifra actual es de 340 reclusos de la organización, un número que sitúa la cantidad de etarras entre rejas en guarismos de comienzos de los años 80 y muy lejos del máximo de 762 que se registró en 2008.
El 21 de octubre de 2011, el día que ETA anunció el final de su actividad terrorista, había 703 miembros de la banda encarcelados en España y otros países. Hoy la cifra se ha reducido a tan sólo 435
El descenso en estos cuatro años ha sido constante, según las cifras manejadas por este diario y que proceden del fuentes de la lucha antiterrorista y de Etxerat, la organización de familiares de presos etarras que en sus cálculos excluye a los reclusos expulsados por la banda por acogerse a la 'Vía Nanclares' de reinserción. Así, en 2012, sólo un año después del anuncio del fin de la violencia terrorista, el número de presos se había reducido casi en un centenar. A finales de aquel año sólo quedaban ya 607 presos. Doce meses después, la cifra quedaba reducida a 527, mientras que al terminar 2014 ésta volvía a bajar a 482. Hoy, son sólo 435.
En esta paulatina y significativa disminución ha contribuido de manera significativa la resolución de octubre de 2013 del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo que puso fin a la llamada 'doctrina Parot' que había alargado el cumplimiento de condena a más de 60 presos de ETA. En los 24 meses transcurridos desde que fuera tumbada la polémica norma, la salida de presos de la banda por este motivo ha sido un goteo constante. De hecho, en lo que va de 2015 aún han sido excarcelados por este motivo siete internos. La cifra total de los beneficiados es, sin embargo, ocultada por Instituciones Penitenciarias, que rechaza hacer pública esta información.
Últimas excarcelaciones
A todos ellos, se suman los reclusos que han abandonado la cárcel tras cumplir íntegramente su condena, muchos de ellos detenidos en los años 80, los de mayor actividad de la organización terrorista. Las dos últimas excarcelaciones se han producido en las últimas semanas. Así, el 27 de septiembre abandonaba la prisión Jesús María Zalacaín Goicoechea, juzgado en 2005 por su pertenencia al entorno de la banda armada. Días después, el 5 de octubre, le tocaba el turno a Vicente Ascasibar Urrutia, detenido en 1998 como integrante del entramado financiero de la banda. La próxima salida también tiene fecha. Se trata de Javier María Salutregui Menchaca, condenado en 2007 por el 'caso Ekin' y que saldrá de prisión el próximo 29 de octubre.
Las dos últimas excarcelaciones de presos etarras se produjeron los pasados 27 de septiembre y 5 de octubre. Ya hay otra prevista para el próximo 29 de octubre
A esta reducción del número de etarras también ha contribuido de manera importante el final de la actividad terrorista y la consiguiente disminución del número de detenidos por parte de las Fuerzas de Seguridad del Estado. Así, desde que el PP llegó al poder a finales de 2011, han sido arrestados 161 presuntos miembros de ETA., 47 de ellos en lo que va de 2015. La mayoría, en España y Francia. Una cifra elevada pero que queda muy lejos de las que se registraron en anteriores legislaturas. Así, en la segunda y última del Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero el número de detenciones se elevó a 342. En la primera, fueron aún más: 397.
Esta disminución de arrestos de miembros de ETA y las continuas excarcelaciones provocaron el pasado mes de abril un hecho insólito en las cárceles españolas: la cifra de los presos preventivos (pendientes de juicio) del terrorismo yihadista superó por primera vez a la de etarras en igual situación. Según detalló entonces en declaraciones a Efe el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, en aquel momento había 61 reclusos relacionados con el autodenominado Estado Islámico y Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI) a la espera de sentarse en el banquillo frente a los cerca de cuarenta en su misma situación como presuntos integrantes de la banda armada. "Por primera vez se ha invertido la pirámide", destacó el fiscal Zaragoza, antes de recalcar que esta diferencia sería aún mayor a finales de año.