El hombre de 45 años que ayer mató a cuchilladas a su expareja en Palma permanece en el módulo de detenidos del hospital Son Espases tras intentar lesionarse dándose golpes en la cabeza.
Fuentes de la Policía han informado de que el agresor, que apuñaló a Sacramento Roca en su puesto de trabajo ante numerosos testigos, se golpeó la cabeza contra las paredes del calabozo en que fue recluido ayer en la Jefatura Superior de Policía de Palma.
Ante este comportamiento, un médico le atendió y aconsejó su traslado al módulo de detenidos del hospital de referencia de Baleares, donde se aplica un protocolo para evitar que se lesione.
Rafael Pantoja asesinó sobre las 16:30 horas de ayer a su expareja de varias cuchilladas en el pecho mientras ella trabajaba como cajera en una tienda de la calle Aragón de Palma y después se dio a la fuga, aunque fue interceptado cerca del establecimiento.
La mujer ha sido la primera víctima mortal de la violencia machista en Baleares en dos años y la cuadragésima cuarta en España durante 2018.