"He venido a mandar, no a escuchar". Esa fue la primera frase que tuvo Leonardo Marcos en su encuentro inicial con los representantes de las asociaciones de la Guardia Civil en el Consejo del Cuerpo. Con solo siete palabras ya adelantó su carácter autoritario que le ha valido para, posteriormente, tener diversos conflictos con el 'núcleo duro' del Instituto Armado. Fue el comienzo de un final que se rubricó este martes aunque ya adelantó la semana pasada a sus allegados que pensaba dejar de ser director general, según informan desde su entorno a Vozpópuli.
La figura, al menos sobre el papel, de Leonardo Marcos cuando fue designado sucesor de Mercedes González era todo un misterio. Sin embargo, ya desde sus primeros pasos en la Dirección General de la Guardia Civil fue cosechando enemigos. Llegaba tarde a los encuentros y tampoco expresaba empatía con los componentes que estaban a su mando.
Este marcado carácter "déspota", como describen a Vozpópuli fuentes que estaban en esas reuniones, se demostró en todo su esplendor en su primera reunión con los miembros del Consejo de la Guardia Civil. El secretario general de AUGC, Juan Fernández Hernández, se acercó a hablar con Leonardo Marcos y recibió esta contestación, sin tan siquiera escuchar el sentir del funcionario. "He venido a mandar, no a escuchar". Toda una declaración de intenciones.
Nadie soportaba a Leonardo Marcos
El ambiente con el 'núcleo duro' de la Institución tampoco era más cordial. "No le soportaba nadie", desvelan estas fuentes. De forma paralela siempre tuvo un segundo plano en la carga mediática. Tampoco gustó dentro del Cuerpo cómo abordó el asesinato de los dos agentes por unos narcos en Barbate.
Es más, Leonardo Marcos manifestó en diversas entrevistas a medios de comunicación que el dispositivo llevado a cabo el día 9 de febrero de 2024 en el Puerto de Barbate fue el correcto. Por estas afirmaciones, AUGC pidió que fuera citado en calidad de testigo en la causa abierta contra los mandos que diseñaron el dispositivo.
Su último acto público, difundido por la Guardia Civil, fue el pasado 7 de septiembre cuando Leonardo Marcos se desplazó hasta Villarcayo (Burgos) para felicitar en persona a los agentes que trabajaban en el dispositivo de seguridad de la Vuelta Ciclista a España.
Pocos días después ya corría como la pólvora su decisión de abandonar el Instituto Armado. Sobrepasado por los acontecimientos, con decenas de frentes internos no se vio capaz de llevar a cabo la reestructuración que el Cuerpo y sus agentes demandaban. Un puesto que "le venía grande" en una etapa marcada por las investigaciones mediáticas que se llevan a cabo desde el Cuerpo con el caso Begoña Gómez, Koldo o el hermano de Pedro Sánchez.
Una despedida sin sorpresas
"Tanta paz lleves como descanso dejas", era la frase más comentada este martes en la sede de la Dirección General en la calle de Guzmán el Bueno. No sorprendió su marcha a los funcionarios que día a día trabajaban a sus órdenes. Los que de verdad sufrieron desde el primer día sus desplantes y sus salidas de tono, sus broncas y su carácter.
Precisamente, en un comunicado difundido este martes, AUGC solicitó que el puesto que ocupaba Leonardo Marcos debía ser para "una persona que ofrezca interlocución y diálogo". "Aspectos esenciales para liderar con éxito una institución de tan alta responsabilidad y complejidad", apuntaron.
Eso sí, esta personalidad tan polémica nunca acaparó las portadas de los medios de comunicación. No tuvo una frase controvertida ni una decisión excepcional. Leonardo Marcos accedió al puesto como un director temporal en una época de tregua por la inmediatez de las elecciones generales.
Su papel tenía todos los visos de ser temporal pero se prolongó durante 15 meses por la victoria del PSOE en las elecciones de 2023. No contaba con papeletas para pasar a la historia. No pasará a ella. Sin embargo, sí que ha dejado marcado a sus compañeros por su carácter y sus acciones. Unas acciones, para algunos reprochables, que quedaron ocultas en los medios y ahora serán olvidadas en visos de comenzar una nueva etapa.