El caso de los insultos racistas a Vinícius llegan a la Justicia. Tres días después de que la Fiscalía anunciase que abría una investigación por presunto delito de odio contra el jugador del Real Madrid, La Liga ha movido ficha ante la Justicia. El órgano que preside Javier Tebas ha interpuesto denuncia en los juzgados de Valencia para judicializar cuanto antes el caso, motivo por el cual la Fiscalía se ha visto obligada a archivar la causa y derivarla a los juzgados de Valencia.
Así lo confirman fuentes de la investigación a Vozpópuli las cuáles matizan que la Fiscalía pone el asunto en manos del juzgado al que por reparto caiga la denuncia pero que ello no quiere decir que dejará de liderar la acusación. Al contrario, la fiscal delegada de Delito de Odio en Valencia, Susana Gisbert, seguirá al frente de las pesquisas abiertas a comienzos de semana en el Ministerio Público por los cánticos racistas al juzgador del Real Madrid.
La Liga, por su parte, denuncia que acude directamente al juzgado porque, según sostiene, las denuncias interpuestas previamente en diferentes órganos de la Fiscalía por cánticos racistas anteriores no han llegado a ningún sitio. "Desde hace algún tiempo, La Liga decidió dar un paso más en su estrategia legal y acudir directamente a los Juzgados. Pero a pesar de ello, dotar a La Liga de una mayor capacidad sancionadora supondría una herramienta eficaz en la lucha contra el racismo en el deporte", reza el órgano.
La Liga arremete contra la Fiscalía
En este caso, sin embargo, la Fiscalía actuó de oficio apenas horas después de los cánticos racistas contra Vinícius que se escucharon el domingo en el Mestalla. El Ministerio Público actuó de oficio pese a que ese mismo día el Real Madrid pidió al Ministerio Fiscal que investigase los hechos por presunto delito de odio.
La fiscal encargada de la materia abrió causa y ordenó recabar los vídeos de los insultos vertidos contra el brasileño así como el acta del partido. Como informó este medio, el objetivo era actuar con celeridad en estas diligencias para presentar denuncia ante el juzgado. Por ello no se preveía citar a declarar ni a los presuntos agresores identificados ni tampoco a la víctima de los hechos. Sin embargo la actuación de La Liga modifica la hoja de ruta puesto que la causa estará bajo la batuta del juzgado al que por reparto caiga el escrito.
Dos 'casos Vinícius'
Con todo, La Liga no es la primera que actúa en la Justicia ya que el sindicato Manos Limpias presentó igualmente denuncia por estos hechos esta misma semana. A ello se tiene que añadir las diligencias abiertas también estos días contra cuatro personas detenidas por colgar el pasado enero un muñeco de Vinícius desde un puente próximo a la ciudad deportiva del club madrileño.
La titular del Juzgado de Instrucción número 26, en funciones de guardia de detenidos, les ha dejado hoy en libertad provisional, aunque les prohíbe aproximarse al propio jugador. Del mismo modo les impide aproximarse a menos de 1.000 metros de la ciudad deportiva del Real Madrid y de los estadios Santiago Bernabéu y el Metropolitano.
Los detenidos, a los que se les atribuye delito de odio y otro contra la integridad moral, se han acogido a su derecho a no declarar ante la magistrada, según han informado fuentes jurídicas. La magistrada que les ha tomado declaración por estar de guardia se ha inhibido sobre el juzgado de instrucción número 28 que es el que va a tramitar ahora las diligencias de investigación.
Lo ocurrido el domingo en Valencia ha generado una enorme polémica dentro y fuera del país. El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti denunció que los insultos a grito de 'mono' y otros improperios que recibió el brasileño fueron inaceptables y que la única víctima de todo lo ocurrido fue el jugador.
El Valencia CF, por su parte, procedió a la apertura de un expediente disciplinario contra los implicados en los hechos y dejó claro que los expulsaría del estadio de por vida y que colaboraría con la Policía para esclarecer lo sucedido. No obstante ha denunciado que la sanción al club che con el cierre de cinco partidos en el Mestalla es "injusta y desproporcional".
