Los exsecretarios generales del PP Francisco Álvarez-Cascos y Javier Arenas, llamados a declarar ante el juez Pablo Ruz este martes, han negado en su declaración que tuvieran constancia de la existencia de contabilidad B. No obstante, ambos admiten falta de control en las donaciones. Su declaración contrasta con la de otros destacados ex dirigentes populares que sí reconocieron el pago de dinero negro como Miguel Ángel Rodríguez y, este mismo martes, el ex cajero del PP Cristóbal Páez.
En su declaración ante el juez, los dos han negado haber percibido las cantidades que figuran en los llamados 'papeles de Bárcenas', que reflejan la supuesta contabilidad B del partido, y que todo lo que han recibido del PP lo han declarado a Hacienda.
Arenas ha rechazado, alegando que él no se expresa en esos términos, la frase que le atribuyó Luis Bárcenas en su declaración cuando explico que al liquidar la supuesta caja B del Partido Popular le entregó en marzo de 2010 el remanente de 4.900 y éste le dijo "chico, cógelos, los metes en un sobre y se los dejas al presidente y el sabrá lo que tiene que hacer".
"No me acuerdo"
Por otra parte, según ha asegurado Gonzalo Boyé, uno de los abogados de la acusación particular presente en la toma de declaraciones, parece que había un "acuerdo" entre los dos exdirigentes del PP, pese a encontrarse ahora en partidos distintos. A su juicio, ambos han mantenido "una versión oficial que no ayuda a nada", coincidiendo en negar "en todo momento cualquier virtualidad probatoria de los papeles de Bárcenas". Y cuando se les preguntaba por algo concreto optaban por decir que no recordaban. "La frase más repetida por parte de Arenas y Cascos ha sido 'No recuerdo'. La memoria tiene esas cosas", ha comentado.
"La frase más repetida por parte de Arenas y Cascos ha sido 'No recuerdo', ha dicho uno de los abogados de la acusación particular
En cuanto a la cita que Bárcenas mantuvo con Arenas y el presidente Mariano Rajoy, el exministro ha contestado que fue una reunión "básicamente amistosa". El abogado ha contrastado la actitud de Arenas y Cascos con la de Cristóbal Páez, el sucesor de Luis Bárcenas al frente de las finanzas del PP, que a su juicio ha sido "más claro" al admitir la posibilidad de que hubiera una contabilidad B en el PP y reconocer que recibió en dos ocasiones sobres con billetes de 500 euros no declarados a Hacienda, informa EP.