Créditos millonarios y sospechosos. El informe pericial remitido por la consultora KPMG al titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid, Elpidio José Silva, dentro del sumario abierto por falsedad documental y delitos societarios contra Gerardo Díaz Ferrán y Miguel Blesa, denuncia que la entidad presidida por este último, Caja Madrid, concedió más de 8,7 millones de euros a dos de los hijos del expresidente de la CEOE con garantías claramente insuficientes. Los autores del documento destacan que de esa cantidad, Gerardo y Marta Díaz Santamaría aún tienen pendientes de devolución más de 6 millones de euros, es decir, cerca del 70% del total. Un cifra, además, "incursa en litigios para intentar la recuperación de todo o parte", según destaca el documento al que ha tenido acceso Vozpópuli.
De los seis créditos concedidos por Caja Madrid a Gerardo y Marta Díaz Santamaría entre 2001 y 2006, los peritos han detectado ausencia de garantías suficientes en tres de ellos
El informe fue solicitado hace meses por el magistrado para aclarar la sospechosa concesión por parte de Caja Madrid de un crédito de 26,5 millones de euros en 2008 al expresidente de la CEOE para sus sociedades Holdisan y Pariholen y en el que figuraba como "garantía un holding empresarial que se encontraba en quiebra", según la querella del sindicato Manos Limpias que dio pie a la apertura del sumario. En aquel momento, Díaz Ferrán era vocal de la entidad financiera. Sin embargo, la investigación, en la que están imputados el empresario, Blesa y otros siete directivos de la caja, ha sacado a la luz otros créditos a mercantiles de Díaz Ferrán y a su entorno familiar por más de 104 millones de euros. Entre ellos están los 8,7 millones concedidos a sus dos hijos.
Sobre estos mismo, el informe pericial, fechado el pasado 25 de abril, detalla que fueron concedidos entre el 29 de noviembre de 2001 y el 2 de octubre de 2006 a Gerardo y Marta Díaz Santamaría a través de seis operaciones de créditos. De ellas, tres se adjudicaron al hijo, actualmente imputado en el sumario que investiga en la Audiencia Nacional el saqueo de Marsans, por el que está encarcelado su padre. En los otros tres aparece como beneficiaria Marta. En concreto, Gerardo Díaz Santamaría recibió en total 5,6 millones de euros en menos de cinco meses. El primero, el 26 de mayo de 2006, por un valor de 1,8 millones de euros y con el aval de una finca valorada por la sociedad de Tasación del Grupo Caja Madrid en cerca de 2,2 millones de euros. El segundo, un mes después, de 465.000 euros con una garantía personal. El último, el 2 de octubre, por 3,36 millones de euros con una vivienda valorada en 4,6 millones de euros como respaldo.
Irregularidades en la mitad de los seis créditos
Los expertos de KPMG resaltan que en una de estas tres operaciones se detectaron dos supuestas irregularidades. En concreto, en el crédito personal por importe de 465.000 euros. El informe destaca en primer lugar que "fue concedido sin más garantía que la personal del beneficiario y la garantía de sus progenitores". Una práctica, esta última, que según los auditoresse generalizó en los seis préstamos concedidos a los dos hijos de Díaz Ferrán. La segunda sospecha se centra en que "no se contó con la autorización preceptiva de la Comunidad de Madrid hasta el 1 de septiembre de 2006, dos meses y medio más tarde" de su concesión el 23 de junio de ese mismo año. En este sentido, los peritos destacan que la propia solicitud de autorización no fue tramitada por la entidad financiera "hasta el 25 de julio de 2006, un mes después de concederse el crédito".
Un préstamo de 1,82 millones de euros a la hija del expresidente de la CEOE estaba avalado con un piso del que sólo estaban libres de carga 347.000 euros de su valor
Más espaciados en el tiempo fueron los tres préstamos que obtuvo su hermana de Caja Madrid. El primero, de 300.506 euros fue concedido el 29 de noviembre de 2011. El siguiente, tres años más tarde, por un millón de euros. El último, el 9 de enero de 2006, por 1,82 millones de euros. En ellos, las garantías fueron, respectivamente, una finca y sendas viviendas. De ellos, el informe destaca las circunstancias en las que se concedieron dos ya que fueron otorgados "por importes cercanos al valor de tasación de los bienes hipotecados a pesar de que estos bienes ya se encontraban hipotecados con anterioridad a favor de otras entidades financieras". En concreto, los expertos de KPMG señalan que el de 1 millón de euros tenía como garantía una vivienda que fue tasada en 1.055.714 euros, "pero que contaba con una carga hipotecaria viva anterior de 340.797 euros" con otra entidad bancaria. "Por lo cual el importe libre de cargas ascendía a tan sólo 714.917 euros, correspondiente a un 71% del préstamos concedido", detalla el informe. El segundo crédito sospechoso es el de de 1,82 millones de euros. Entonces, la hija del expresidente de la CEOE aportó como garantía "una vivienda que fue tasada en 2.806.206 euros, pero que contaba con una carga hipotecaria viva anterior de 2.512.303 euros". De este modo, resaltan los peritos, sólo quedaban libres de cargas algo más de 347.000 euros, es decir, "tan sólo un 19% del préstamo concedido".
El amplio documento encargado a KPMG por el juez Silva incluye también un capítulo dedicado al "grado de cumplimiento" de los créditos concedidos a Díaz Ferrán, sus empresas y sus familia. En él se destaca que el 15% del importe total de ellos "ha sido desatendido y se encuentra incurso en litigios para intenetar la recuperación de todo o parte". Un porcentaje que sube espectacularmente cuando analizan con detalle los seis concedidos a los dos hijos del expresidente de la CEOE, ya que de los 8,7 millones, sólo han devuelto un 30%. De hecho, el documento recalca que de los 5,6 millones con los que resultó beneficiado Gerardo Díaz Santamaría aún quedan pendiente de cobrar algo más de 4,6 millones, es decir, el 83%. En el caso de su hermana Marta, de los 3,1 millones de euros que le concedieron no ha devuelto aún 1,3 millones. O lo que es lo mismo, el 44%. Unos porcentajes de morosidad sólo superados por tres empresas del grupo: la patrimonial Inversiones Grusian (debe la totalidad de los 434.400 euros prestados), Viajes Marsans (que no ha abonado ni un euro de los 5.3 millones que recibió) y Hotetur Club SL (a la que que aún le queda por pagar 1,5 millones de los 2 millones recibidos).