El Gobierno ha decidido suavizar esta semana los trámites para la renovación del permiso de residencia a los inmigrantes que ya residían legalmente en España. La Dirección General de Migraciones envió este pasado lunes tres comunicaciones en las que flexibiliza determinados criterios, con lo que el Ejecutivo facilita que los extranjeros que ya contaban con permisos de residencia pueden renovarlo con menos trabas burocráticas que antes.
“Dentro de este objetivo de que nadie quede atrás”, indica la Dirección General de Migraciones, “se encuentran también, como no puede ser de otra forma, los ciudadanos extranjeros que residen en España". En total, son cinco millones las personas inmigrantes que residen regularmente en el país, a quienes la pandemia ha dificultado la renovación de sus permisos por diversos motivos.
Por ello, el Gobierno renovará de forma ordinaria los permisos de residencia de aquellos extranjeros que cobran el paro o en este momento reciben “prestaciones económicas asistenciales de inserción”, por lo que ya no será necesario presentar un contrato en vigor, algo que sería imposible en multitud de casos como consecuencia de la crisis económica derivada de la sanitaria.
Además se suavizan también las exigencias para aquellos inmigrantes que no han conseguido trabajo o subsidios en los últimos meses, y algunos trámites burocráticos, como el informe de integración, se simplifican para facilitar la renovación del permiso de residencia. Según informa El Confidencial, que la orden no solo relaja las normas para quienes tienen que renovar sus permisos, pues relaja las requisitos para aquellos inmigrantes que quieran obtener la residencia por razones de arraigo.
Según El Confidencial, a quienes pretenden regularizar a sus familiares, Extranjería les pide acreditar que pueden mantenerlos a través de unos baremos económicos concretos. La nueva orden lo que hace es rebajar considerablemente los ingresos mínimos exigidos.
