Los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil tiran del hilo para conocer todos los detalles en la trama de compra de votos en Mojácar (Almería) que implica a dos candidatos del PSOE. Tras las siete detenciones de este miércoles, los agentes tratan de reconstruir los pasos de los miembros de esta red, que necesitaba al menos medio millar de sufragios para arrebatar la alcaldía al PP. Según sus sospechas, los investigados podrían haber aprovechado reuniones celebradas en sedes del partido socialista para captar los apoyos que después pagarían en metálico o con otros beneficios, según informan a Vozpópuli fuentes del caso.
Con una población próxima a los 6.100 habitantes, el color del Ayuntamiento de Mojácar depende de un pequeño número de votos. En las elecciones municipales de 2019 el PP obtuvo 1.692 votos, lo que se tradujo en cinco concejales de la corporación municipal, frente a los 1.145 apoyos del PSOE-A, que sirvió a los socialistas para tener tres representantes. El tercer partido en liza, Para la Gente, se quedó fuera de la representación.
Sin embargo había un colchón suculento entre las abstenciones, que ascendieron a 1.206 en las últimas municipales. La trama dedicada a la captación y compra de sufragios tenía marcada como objetivo la comunidad extranjera residente en Mojácar, con especial énfasis entre las personas de origen latinoamericano. Algunos de los detenidos son originarios procedentes de países de esta región como Colombia y Venezuela.
Lo que los agentes tratan de desentrañar es el modo en el que los miembros de la red se acercaban a esta comunidad con el ánimo de comprar su voto. El origen de la investigación está en una denuncia que se registró en una Comandancia de la Guardia Civil, que inmediatamente derivó el caso a los agentes especializados de la UCO.
El mapa de relaciones
Las pesquisas corrieron en tiempo récord, teniendo en cuenta la necesidad de desarticular la trama antes de que se cerrase el plazo permitido para depositar el voto por correo, habida cuenta de que el objetivo principal de la Guardia Civil era frustrar el intento de pucherazo y obtener las pruebas relacionadas, que se perderían en caso de que los sufragios se entregasen de forma definitiva a Correos. Algunos de los votos comprados si fueron depositados en las urnas.
Según ha podido saber Vozpópuli, los agentes ya cuentan con un extenso mapa de relaciones entre los diferentes miembros de la trama, que se ha ampliado tras tomar declaración a los detenidos. Los investigadores sospechan que los investigados habrían tratado de captar votos entre la comunidad extranjera tras las reuniones abiertas celebradas en oficinas del PSOE de Mojácar, a las que eran invitados los miembros de la comunidad extranjera. Los agentes sospechas que se produjeron más de 200 encuentros.
A partir de ahí se estableció una amplia red de compra de sufragios, previo pago de una cantidad aproximadas de 100 euros por voto. También se cree que podían ofrecer el acceso a subvenciones, ayudas o empleos públicos para obtener el favor de personas en una situación económica frágil.
En los registros llevados a cabo por la Guardia Civil se han intervenido censos electorales y diversas anotaciones, así como cerca de 200 papeletas con el objetivo de manipular el resultado de las próximas elecciones municipales.
Mojácar, cargado de simbolismo
El caso está siendo investigado por el juzgado número 4 de Vera, Almería, y se encuentra bajo secreto de sumario. Uno de los detenidos es Cristóbal Vizcaíno, número 5 en la candidatura socialista de Mojácar. El número 2 de la candidatura, Francisco Bartolomé Flores, se encontraba en Madrid en el momento de la operación. Fue detenido después de trasladarse a Almería, donde prestó declaración.
Este jueves el juzgado acordó la puesta en libertad de uno de los detenidos en relación al supuesto fraude en el voto por correo. Está siendo investigado por un delito electoral, según informan fuentes jurídicas a este medio.
Hay un total de 10 personas investigadas, siete de las cuales fueron detenidas, tres de ellos tienen nacionalidad sudamericanas. Las otras seis están pendientes de pasar a disposición judicial en los próximos días. La investigación se inició a raíz de una denuncia ciudadana a la actual alcaldesa de Mojácar y número dos de la lista del PP, Rosa María Cano. La regidora acudió a la Guardia Civil tras comunicarle los vecinos que habían recibido estas ofertas.
El Ayuntamiento de Mojácar está cargado de simbolismo para el PSOE, ya que es el lugar elegido por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su familia para pasar los periodos vacacionales. Prueba de esa relevancia está en la participación del ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, en un acto electoral celebrado por el candidato del PSOE al Consistorio, Manuel Zamora. El PSOE ya ha borrado de su página web las fotos y la nota de prensa de este acto tras las detenciones relacionadas con la trama de compra de votos.
Yomismo
¿Es que no se acabará nunca la corrupción de PSOE y PP?
Pablito 1
La compra de votos ha sido una constante en la democracia española. Que ahora, por existir mayor tensión política que en otras convocatorias se haya destapado los escándalos de Melilla o Mojacar, solo demuestra, que muchos cargos que han ejercido y ejercen el poder, no ha sido la voluntad popular de las urnas quien les ha subido allí. Siempre se ha dicho que hay que modificar la ley electoral procurando subsanar estos escándalos, que no cesan de aparecer. ¿En Cataluña, por ejemplo, con una claridad electoral evitando la compra de votos y la coacción, el golpismo obtendría los mismos votos que dice ahora obtener? Pues no, y obviemos los detalles que haberlos los hay.
Ppmtnez
Yo creo que el fraude del voto por correo no se limita a Melilla y Mojacar solamente, estos son los casos que se han descubierto. Por algo hay un video de P. Sánchez pidiendo que se vote por correo