La Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), órgano dependiente del Ministerio de Hacienda y Función Pública, ha detectado "incorrecciones" en las cuentas anuales de la Dirección General de Tráfico (DGT) correspondientes al ejercicio de 2017, según se desprende del Informe de auditoría de dichas cuentas en la Jefatura Central de Tráfico, publicado en el BOE y recogido por Europa Press.
Según indican fuentes de la DGT a Europa Press, todas las incorrecciones de las cuentas de 2017 no son excepcionales, pues se repiten año tras año.
En concreto, los auditores han detectado dichas irregularidades en tres apartados: ingresos por sanciones; sanciones recaudadas por cuenta del Consorcio de Compensación de Seguros; y Estado de Flujos de Efectivo.
El Informe señala que en 2017 la DGT solo contabilizó 109 millones de euros de los 268 que según los auditores tuvo en concepto de ingresos por sanciones, además de no registrar otros ingresos de anulaciones y cancelaciones de derechos por insolvencia, prescripción y otras causas; y rehabilitaciones y reactivaciones de deudas antiguas. Según el Informe, se trata de un "incumplimiento" que lleva produciéndose "de manera reiterada en las cuentas de años anteriores".
En segundo lugar, detecta "incumplimientos contables" en la "forma de registrar la gestión" en las sanciones recaudadas por cuenta del Consorcio de Compensación de Seguros, además de por omitir información al respecto y por aparecer incrementados los importes de derechos reconocidos y derechos anulados.
En tercer lugar, los auditores ven una clasificación "errónea" en los cobros y pagos que figuran en el Estado de Flujos de Efectivo, estimando un impacto de este error de 32 millones de euros.
Opinión denegada en tres partidas
Por otro lado, los auditores de Hacienda han "denegado" emitir opinión con respecto a las partidas de Inmovilizado no financiero, Deudores por sanciones e Ingresos por tasas de Inspección Técnica de Vehículos (ITV) al no haber podido obtener "evidencia de auditoría que proporcione una base suficiente y adecuada para expresar una opinión".
Así, con respecto al Inmovilizado no financiero, el Informe ha constatado que el 92,62% del valor del inmovilizado no financiero que figura en el balance "o bien no está respaldado por un inventario" o, para aquellos activos que sí están inventariados, no se ha podido "conseguir toda la documentación acreditativa de la valoración que tienen asignada".
"En consecuencia, y dado que el inmovilizado no financiero representa el 68,04% del total activo del Organismo, no podemos opinar sobre el 63,02 % del activo", expresan. La IGAE tampoco puede opinar sobre el gasto en amortizaciones del inmovilizado no financiero al no poder "determinar" su "correcto valor". "La imposibilidad de confirmar el verdadero valor del inmovilizado ni de los resultados de la Entidad hace que tampoco podamos opinar sobre el valor del Patrimonio Neto que figura en el Balance", añade.
No obstante, destaca que respecto a este punto, la DGT reconoce la situación existente y ha informado de que ha establecido un plan de acción para resolverla.
Según el Informe de auditoría, Tráfico también reconoce la situación existente respecto a la contabilidad de derechos pendientes de cobro y también ha implementado un plan de acción para resolver este asunto, sobre el que la IGAE dicta que el organismo no ha podido proporcionar información sobre el importe de las sanciones vivas (deducidas las prescritas y las bajas por insolvencia y otras causas) que al cierre del ejercicio tenía enviadas a la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) para su cobro por procedimiento de apremio.
Importe "contradictorio" en ingresos por la ITV
Los auditores también han denegado emitir su opinión con respecto a los ingresos por tasas de la ITV, al no poder verificar que la recaudación de 77 millones de euros ingresada por las entidades concesionarias de este servicio, "sea la que corresponde a las inspecciones realmente efectuadas durante el ejercicio". "Dicho importe es contradictorio con la información que ofrece el Registro de Vehículos sobre inspecciones realizadas en el mismo periodo", sentencian.
Finalmente, sentencian que no ha sido posible comprobar que el Balance de Resultados e Informe de Gestión referido al grado de realización de objetivos y al coste de los objetivos realizados, esté "libre de errores u omisiones".
El Informe también subraya que es el director general de Tráfico el "responsable de la formulación de las cuentas anuales de la entidad", así como el "responsable del control interno que considere necesario para permitir que la preparación de las citadas cuentas anuales estén libres de incorrección material".
Cambio de director
Las cuentas anuales a las que se refiere el Informe fueron formuladas en un primer momento por el director general de Tráfico el 13 de abril de 2018, es decir, Gregorio Serrano, las cuales fueron puestas a disposición de la Intervención Delegada ese mismo día. Sin embargo, el documento informa de que "dichas cuentas fueron modificadas" posteriormente, el 20 de julio de 2018. En esa fecha, Pere Navarro ocupaba ya el cargo de director general desde principios de mes.
Según indican fuentes de la DGT a Europa Press, es también habitual que cuando haya un cambio de director general se produzca una "reformulación" de las cuentas, al tener que estar estas firmadas por el actual director y, por tanto, se vuelven a formular las correcciones detectadas tanto por la IGAE como por el Organismo al que se audita.