El líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha desdeñado al PP como interlocutor del Gobierno de coalición ante las "grandes decisiones de país" que debe adoptar el Ejecutivo, porque, ha remarcado, se van a adoptar entre su partido y el PSOE y con el apoyo del llamado "bloque de la investidura". A pesar de ello, el presidente del Gobierno se encuentra en plenas negociaciones con el principal partido de la oposición para renovar a los jueces del CGPJ, el órgano de gobierno de los magistrados.
En la sesión de control del Congreso, Iglesias ha respondido a una pregunta del secretario general del PP, Teodoro García Egea, quien le ha acusado de formar parte no del "gobierno de la gente, sino contra la gente" con un programa "antisistema", cuya "aplicación práctica" es la violencia callejera de los últimos ocho días.
Iglesias ha hecho hincapié en que la época del bipartidismo, en la que el PP ejerció como partido de gobierno y también de oposición, "se ha terminado" y ha reconocido entender su "nostalgia", así como la de los poderes económicos y mediáticos por este tiempo ya pasado.
Una nostalgia que, ha recalcado el vicepresidente segundo, "choca con la realidad", porque él mismo les habla desde el Gobierno y además, le ha anunciado, ahora "las grandes decisiones de país las va a tomar un gobierno de coalición y el bloque de la investidura".
Competir con Vox
Así que, ha insistido, "los grandes debates de país no los vamos a tener con ustedes" sino "en el seno" del Gobierno de coalición y con ese bloque de la investidura.
"Y mientras tanto, ustedes van a seguir compitiendo para ver quién hace más ruido desde el escaño, con Vox", ha concluido, antes de desear "buena suerte" a García Egea en esta tarea.
El diputado del PP no solo había reprochado a Iglesias que formara parte de un gobierno "contra la gente", sino que le había acusado de ser "antisistema", pero "un antisistema un poco aburguesado, con despacho y moqueta, con Guardia Civil en la puerta y niñera pagada por todos los españoles".
De paso, Teodoro García Egea ha afeado el silencio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, porque según él "calla" cuando Iglesias "ataca a periodistas, lanza violentos a la calle o imputan a su partido por corrupción".
