Ignacio González ha logrado frenar las pesquisas que se dirigían en su contra en el caso Ático sobre el origen del dúplex de lujo en Estepona. Tras meses de debate jurídico, la Justicia ha dado por zanjada la polémica: por una cuestión de plazos, no se podrá investiga más.
La Audiencia de Málaga ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por la Asociación Afectados por la Gestión de la Televisión Pública Madrileña (AAGTPM) en el que se pedía que se reabrieran las pesquisas que recién acaba de dar por cerradas el juez a cargo del caso Ático.
En un auto del 1 de octubre, al que ha tenido acceso Vozpópuli, el tribunal ha dado la razón al expresidente madrileño y ha determinado que "cuando se solicitaron las nuevas diligencias, el plazo máximo de investigación había finalizado". Según han explicado los jueces, "al instructor no le quedaba otra opción que denegar las diligencias que se le pedían, por imperativo legal".
Meses de debate
La acusación popular suplicó que se acordara "revocar el auto dictado permitiendo la continuación de la instrucción al ser los plazos impropios y meramente orientativos. Y solicitó que se planteara una "cuestión de inconstitucionalidad". En el recurso de apelación, al que tuvo acceso Vozpópuli, la acusación hizo hincapié en que la imposibilidad de proponer más diligencias o su denegación por transcurso del plazo previsto para instruir e investigar vulneraba "el derecho a la prueba", establecido en el Código Penal.
La petición de los extrabajadores de Telemadrid respondía al auto del magistrado en el que -a petición de Enrique Cerezo, también imputado en la causa- se denegó el plazo de prórroga de la investigación; una decisión que la asociación calificó de "contraria a derecho y perjudicial para los intereses encomendados".
Ahora, tras la decisión de la Audiencia de Málaga, el juez instructor tendrá que decidir si acuerda el procesamiento de Ignacio González o por el contrario archiva la causa, como piden las defensas del matrimonio González-Cavero y de Enrique Cerezo.