El sorteo del Niño de este domingo es el primero en el que aquellos que obtengan un premio de más de 2.500 euros deben tributar con el nuevo impuesto del 20%. Con esta tasa, el Gobierno espera ingresar 824 millones de euros en los dos primeros ejercicios.
El impuesto está inlcuido en la nueva ley de medidas tributarias para 2013 y 2014, aprobada definitivamente el pasado mes de diciembre y que establece este gravamen en el IRPF para las loterías del Estado, comunidades autónomas, Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), Cruz Roja Española y entidades análogas europeas.
De esta manera, los premios se integrarán en la declaración de la renta pero sin incluirse en la base imponible. Por este motivo, no afectarán al establecer los mínimos para acceder a cualquier ayuda pública, como becas o prestaciones sociales. Asimismo, no requiere presentar declaración, ya que se devenga en el momento en que se abone el premio.
La retención del 20% se hará por la parte del premio que supere los 2.500 euros. De esta forma, si el total es de 10.000 euros, sólo se tributará por los 7.500 restantes, de los que Hacienda se quedará 1.500. En caso de que el premio sea de titularidad compartida, los 2.500 euros exentos de este impuesto se repartirán entre los cotitulares en función de la cuota que les corresponda.
El presidente de Loterías y Apuestas del Estado (LAE), José Miguel Martínez, ha definido este gravamen como un "impuesto solidario" en estos tiempos difíciles.