España

Nóos solicitó el asesoramiento de Cuatrecasas para la puesta en marcha de su sociedad sucesora

El Instituto del Iñaki Urdangarin acudió al bufete de abogados buscando recomendaciones para la preparación de los estatutos fundacionales de la Fundación Cultura, Deporte e Integración. Torres recibió poderes para administrar dicha entidad a pesar de que aseguró al el juez que “no era su proyecto”.

  • Iñaki Urdangarin, en los juzgados de Palma de Mallorca el pasado mes de febrero.

El Instituto Nóos solicitó el asesoramiento, a mediados de 2006, del bufete catalán Cuatrecasas para la puesta en marcha de una nueva sociedad, unas recomendaciones relativas a la preparación de los estatutos fundacionales y a la normativa vigente que se corresponderían con la puesta en marcha de la Fundación Cultura, Deporte e Integración Social (FDCIS), tal y como consta en un correo remitido por uno de los socios del despacho, al que ha tenido acceso Europa Press. En concreto, la FDCIS fue impulsada en diciembre de 2006 tras ser neutralizada la sociedad Areté en cumplimiento de las recomendaciones cursadas días antes por el asesor externo de la Casa Real, José Manuel Romero, al percatarse de que Areté era una "reproducción" del esquema de Noos.

Según sostiene el propio Romero, Conde de Fontao -citado a declarar este martes como testigo en el marco del 'caso Nóos'-, su intervención en este sentido se limitó básicamente a aconsejar al Duque que hiciera una separación "entre las actividades mercantiles y las relativas al fomento social del deporte", disolviera la Fundación Areté que creó con su exsocio Diego Torres y se limitara a figurar como miembro del consejo asesor en la FDCIS.

Cuatrecasas aparece relacionado en el 'caso Nóos' con la preparación del proyecto Eurocopa de Naciones

En el email, dirigido en concreto al exdirectivo de Nóos Antonio Ballabriga, el abogado le transmitía "cuestiones esenciales de la fundación a constituir". Así, recogía en él cuestiones normativas relacionadas con la capacidad para fundar, requisitos y formalidades para ello, la documentación necesaria, todo ello en línea con el papel representado hasta entonces por Nóos. "Dada la función y finalidad perseguida por la Fundación, entendemos que la misma debería tener el carácter de estatal, ya que el carácter de autonómica no le permitiría su actuación a nivel internacional", explicaba el correo, quedando el abogado "a vuestra entera disposición para comentar o aclarar cualquier duda al respecto".  

Tras confirmarle Ballabriga que lo analizarían, en un correo nuevo el letrado del bufete le hace llegar un nuevo borrador del "protocolo de colaboración", que considera "ajustado" a lo que ya habían comentado en una reunión anterior, tal y como le pone de manifiesto. El asesoramiento por parte del bufete Cuatrecasas aparece también relacionado en el 'caso Nóos' con la preparación del proyecto Eurocopa de Naciones. Cabe recordar que la FDCIS aparece vinculada a la supuesta estructura fiduciaria creada por el Duque de Palma, Iñaki Urdangarin, Urdangarin, y su exsocio Diego Torres para desviar dinero al extranjero, concretamente a Belice y Reino Unido, y donde jugaba un papel fundamental la sociedad De Goes Center for Stakeholder Management.

Poderes para Torres

Además, un certificado inscrito en el Registro de Fundaciones acredita que Torres recibió poderes, el 12 de abril de 2007, para administrar la Fundación a pesar de que en su declaración ante el juez el imputado aseguró no haberse dedicado a la labor de esta entidad. "No es mi proyecto, ni yo gano nada de la Fundación", espetó.

El documento, al que tuvo acceso Europa Press, certifica cómo en esa fecha el patronato de la FDCIS acordó por unanimidad nombrar a Torres como director de la entidad así como otorgarle poderes "tan amplios como se considere necesario" para la administración de la Fundación, dotándole así de facultades "para el buen funcionamiento" de la asociación.

No obstante, Torres ha entregado nuevos correos a la causa con los que intenta reforzar la idea de que el yerno del rey Juan Carlos "era quien estaba detrás" de la Fundación considerada sucesora de Nóos. Su defensa postula que "quien estaba detrás, incluso delante si se nos permite el juego de palabras", de la FDCIS era Urdangarin, "lo que no era ningún secreto".

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