El juez y la acusación popular han iniciado sus últimos trámites para establecer si hay ligazón entre las presuntas irregularidades contables del Instituto Nóos y la Infanta Cristina, es decir, si fue corresponsable de las decisiones de Iñaki Urdangarin en Nóos al tomar decisiones ejecutivas de pagos y cobros y, por tanto, puede volver a ser imputada. Es lo que investiga al titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, José Castro, quien ha solicitado a la Agencia Tributaria que le entregue los conocidos como “modelos 347” en los que figure la hija del Rey. Esos modelos recogen los pagos y cobros realizados con terceras personas y servirían para probar si la hija del Rey tuvo o no una actuación ejecutiva en las actividades supuestamente irregulares del Instituto Nóos.
Los llamados modelos 347 reflejan todos los cobros y pagos en efectivo superiores a los 3.000 euros, los arrendamientos en los que la hija del Rey hubiera cobrado o pagado, así como una relación de quienes eran los clientes y proveedores de las operaciones realizadas por la Infanta. Sirven, por tanto, para analizar los gastos e ingresos en los que una persona ha intervenido así como para cruzar información con las contabilidades de clientes y proveedores.
La providencia del juez sobre las cuentas de la Infanta puede terminar cruzándose con las de las principales empresas con las que Aizoon realizó transacciones, según refleja su contabilidad oficial. El escrito presentado por Manos Limpias pide que se inste a la Agencia Tributaria a revelar todas las transacciones que esas cinco empresas tuvieron con la hija del Rey: Aizoon S.L., Motor Press Ibérica, Aceros Bergara, Mixta África (una inmobiliaria en la que Urdangarin y la Infanta tienen un 0,09% del capital) y Altadis.
La participación activa en decisiones empresariales podría conducir a una nueva imputación de la Infanta puesto que el argumento que la Audiencia de Palma utilizó para desimputarla fue que “no bastaría con el mero conocimiento de las actividades y de su eventual ilicitud sino que se requiere su efectiva participación (…) de lo cual no existe dato indiciario alguno que la sostenga”.
El juez investiga también las cuentas personales de la Infanta
El oficio del juez implica investigar también las cuentas personales de la Infanta Cristina. En sus declaraciones de la Renta del año 2007 declaró rendimientos por actividades económicas por valor de 19.710 euros que subieron hasta los 20.857,50 en 2008. El modelo 347 solicitado por el magistrado debe reflejar también quién pagó y por qué actividades cobró la Infanta.
Entre los conceptos que el juez investiga se encuentran los conceptos que denunció la propia Agencia Tributaria. Hacienda reveló en su último informe que la empresa que la Infanta Cristina compartía con su marido, Iñaki Urdangarin, pagó sus facturas personales. Entre los conceptos incluidos figuran un curso de “coaching” para directivos en el año 2007, sesiones de “animación infantil” para los hijos de los dos socios --una partida que el fisco describe como “gastos claramente pertenecientes al ámbito personal o familiar”-- y 6.800 euros en pagos a “un profesional del espectáculo” en el año 2005 al que Hacienda no identifica.