Un informe redactado por un think tank alemán sobre el envío de armamento de los países aliados a Ucrania destaca la anomalía de España -y un reducido grupo de naciones- al ocultar el material que se ha destinado a Kiev para hacer frente a la invasión rusa. Desde Moncloa se sostiene que se trabaja en el envío de más material bajo estrecha coordinación con el gobierno ucraniano, si bien se desiste en detallar su composición por motivos de “prudencia y seguridad”.
Las reflexiones figuran en un informe redactado por el Kiel Institute for the World Economy, una fundación independiente financiada básicamente por el Gobierno Federal Alemán y el estado germano de Schleswig-Holstein. El think tank reúne los datos disponibles sobre el material armamentístico que los diferentes países han comprometido y enviado a Ucrania para defenderse de la invasión de Vladimir Putin, con un protagonismo destacado de Estados Unidos.
España figura en el puesto vigésimo primero en cuanto a los países donantes de armas -o que envían dinero a Ucrania para la compra de material-, detrás de naciones como Bélgica, Lituania o Luxemburgo. Sin embargo, la conclusión es engañosa, puesto que el think tank sólo incluye los datos que España sí ha hecho públicos, relativos a una mínima parte de los envíos. En este sentido, el documento señala la opacidad del Gobierno español en esta cuestión.
La fundación alemana aborda en su informe, titulado El rastreador de ayuda a Ucrania, los casos de “información perdida” y la “ayuda oculta” de un pequeño puñado de países. De la extensa lista de naciones aliadas, sólo hay seis que han optado por no hacer públicos los datos de material enviado a Ucrania; a saber, Finlandia, Francia, Alemania, Italia, Portugal y España.
“En las últimas semanas, sin embargo, estos países revelaron el valor de la mayoría de su ayuda militar”, detalla el informe, con datos actualizados hasta el pasado mes de junio. España, no obstante, no ha informado de más envíos concretos desde esa fecha. “La preocupación por el apoyo oculto se está volviendo menos aguda en las versiones recientes”, incide el think tank, revelando que cada vez son menos las naciones que optan por esconder el apoyo enviado a Ucrania.
El apoyo de España a Ucrania
En el caso concreto de España, el think tank señala que Moncloa sólo reveló el contenido del primer envío a Kiev. Fue Margarita Robles quien, en una entrevista en Antena 3, manifestó su compromiso de mandar 1.370 lanzagranadas y 700.000 cartuchos para fusiles y ametralladoras, lo que suscitó una gran polvareda en el Gobierno de coalición con Unidas Podemos. El informe se remite a informaciones publicadas en prensa para confirmar que España ha mandado otros dos lotes por valor de 21 y 12 millones de euros.
Pero esos tres envíos son una mínima muestra de todo el stock que España asegura haber enviado a Ucrania. Según el último balance elaborado por el Ministerio de Defensa, las Fuerzas Armadas han realizado 19 vuelos con “material ofensivo y defensivo” para hacer frente a la invasión de Rusia. A esos lotes hay que sumar el contenido del buque logístico Ysabel, del Ejército de Tierra.
¿Qué más material ha enviado España, además de los tres casos detallados por el think tank alemán, hasta completar todo el stock armamentístico en los 19 vuelos y a bordo del Ysabel? No hay información oficial. “Prudencia” y “seguridad” son los motivos que se esgrimen para no revelar los datos.
Hay algunos casos destacados por parte del Gobierno español. Uno de los más recientes está relacionado con los carros de combate Leopard que el Ejecutivo pensaba facilitar a Zelenski, pero las valoraciones técnicas del proyecto frustraron su viabilidad: “Están en un estado lamentable”, admitió Margarita Robles.
Los carros de combate eran de fabricación alemana, adquiridos por España en 1996. Pronto se sustituyeron por los Leopardo nacionales, adaptados a los nuevos desafíos militares, y los germanos quedaron en desuso en una base de Zaragoza.
A los problemas técnicos habría que sumar otras cuestiones de política internacional, después de que varios medios alemanes recogiesen la inquietud que despertó en Berlín que sus viejos carros de combate pudieran quedar en evidencia en un escenario tan demandante como el ucraniano. En lugar de enviar los carros de combate, España optó por donar una veintena de blindados TOA M-113, destinados al transporte de personal, adelantó El País.
Al margen de la entrega de material armamentístico, el Ministerio de Defensa destaca las “numerosas actividades” de asistencia humanitaria que las Fuerzas Armadas han desarrollado en favor del pueblo ucraniano. En concreto, cita el traslado de 600 personas vulnerables a nuestro país, incluidos heridos de guerra que reciben tratamiento en el Hospital General de la Defensa en Zaragoza.
antonioe
Regalar armas nos convierte en beligerantes encubiertos, cobardemente y para mayor gloria de EEUU y Reino Reino Unido, los que marcan la política de la OTAN para sus propios intereses que no son los nuestros.