La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha dado a entender este martes que su departamento ya no va a hacer una nueva propuesta para la reforma de la Ley de Libertad Sexual tras las siete alternativas que asegura haber puesto sobre la mesa y ha retado al PSOE a plantear un nuevo texto si no le gustan las que ha intentando impulsar su ministerio.
Según ha explicado, los dos socios del Gobierno deberían llegar a un acuerdo antes de que la reforma registrada por el PSOE se vote en el Pleno del Congreso del próximo 7 de marzo. Hoy por hoy no es descartable que Unidas Podemos se desmarque de los socialistas e incluso que acabe votando en contra, sostienen en las filas 'moradas'.
Montero respondía así, desde los pasillos del Congreso, al portavoz del Grupo Socialista, Patxi López, quien ha dejado claro que el PSOE no va a dar "más vueltas" con los 'enredos' que achaca al socio minoritario del Gobierno con el 'sí es sí' y les ha instado a presentar nuevas alternativas.
Sin interlocución desde que se registró la reforma
La también dirigente de Podemos ha reconocido que no hay interlocución con el PSOE desde que los socialistas registraron su proposición de ley el 6 de febrero, ha insistido en que ella no se ha "levantado la mesa" y ha pedido "por favor" al socio mayoritario del Ejecutivo que vuelva a la negociación.
En este contexto, ha señalado que al PSOE no le convencen sus ideas de reforma, en Igualdad están "dispuestas a escuchar otras diferentes", eso sí, con la "condición" de que mantengan el "consentimiento en el centro" y no se vuelva a distinguir entre agresiones en función de si hay o no violencia e intimidación.
"Ellos tienen todas nuestras propuestas, si no les gustan, podemos evaluar otras", ha dicho, llamando de nuevo a la búsqueda de un acuerdo antes del 7 de marzo --día en que se votará la toma en consideración de la proposición de ley que el PSOE presentó unilateralmente-- para evitar "dar oportunidad al PP y Vox de volver al Código Penal de la violencia y la intimidación y de 'La Manada'" como sucede, a su juicio, con el texto del PSOE.
"Estamos cediendo por encima de todas nuestras posibilidades, estamos aceptando reformar la ley, subir penas si ese es el deseo del presidente aunque el feminismo no cree que eso necesariamente suponga una mejor respuesta a las víctimas", ha enfatizado, recalcando que su deseo es llegar a un acuerdo, con las citadas condiciones.
Ante las pregunta de Patxi López de si Igualdad realmente está dispuesta a cambiar la ley, la ministra ha abundado en que han propuesto "subir penas, reforzar agravantes y todas las propuestas que permitan dar una respuesta unitaria como Gobierno y con la mayoría feminista". "Si hay voluntad de acuerdo y queremos que el consentimiento siga en el centro, hay muchas opciones técnicas, de sobra", ha concluido.