Hace dos semanas, expertos de la Generalitat aseguraban que "no hay base para decir que Cataluña quedaría fuera de la Unión Europea si se independizara". Una opinión que no comparte el expresidente del Eurogrupo Jean-Claude Juncker, quien afirma este viernes que "los que creen que Europa aceptaría, sin más, a una Cataluña independiente, se equivocan profundamente".
El luxemburgués, candidato del Partido Popular Europeo a presidir la Comisión Europea en sustitución de José Manuel Durao Barroso, asegura, en una entrevista con el periódico 'Abc', que "no es el momento de las divisiones, sino de la conjunción de todas las fuerzas nacionales españolas para que España pueda seguir siendo el país que tanto ha aportado a la Unión Europea". "¡Que España no olvide su propia historia y el ejemplo que dio a Europa entera al final del franquismo", remata a este respecto.
"España no sería el gran país que es sin la UE y el euro", sostiene Juncker
"Si Cataluña optara por esa independencia, en el caso de que eso fuera aceptado por España, dado que la Constitución lo prohíbe, si esa Cataluña presentara su demanda de adhesión a la Unión Europea, hay que saber que esa demanda -porque haría falta absolutamente una demanda de adhesión- no se resolvería fácilmente", advierte Juncker.
El luxemburgués zanja sus declaraciones sobre el desafío soberanista afirmando que respeta a Cataluña y a los catalanes "muy profundamente", pero que "a la vista de los grandes desafíos que esperan a Europa este siglo, especialmente en los próximos 50 años, es evidente que no es el momento de dividirse".
"Lo más fácil es culpar a Europa"
El candidato a la Comisión Europea, quien estuvo al frente de la zona euro cuando la crisis apretó con mayor fuerza, defiende el papel ejercido por las instituciones comunitarias y las medidas tomadas ya que "si no hubierámos rescatado al sistema financiero español, la gente de menos recursos lo habría perdido absolutamente todo".
"A medio y largo plazo los programas que hemos puesto en marcha en circunstancias difíciles probarán que teníamos razón", afirma el candidato del PP europeo
"Siempre es lo más fácil culpar a Europa. En unos países nos critican por haber sido rigurosos y en otros por haber sido solidarios. No es que hayamos querido salvar a los bancos para complacer a los banqueros, sino porque no queríamos poner en peligro los sistemas sociales y presupuestarios de los países", sostiene en 'Abc'.
Y concluye: "A medio y largo plazo los programas que hemos puesto en marcha en circunstancias difíciles probarán que teníamos razón. España no sería el gran país que es sin la UE y el euro".