Un avión con unos 250 turistas españoles varados en la India ha llegado este domingo al aeropuerto de Madrid-Barajas Adolfo Suárez tras sufrir una odisea en el país asiático por la sucesiva cancelación de vuelos por la Covid-19.
El vuelo, fletado por el Gobierno español, partió de Nueva Delhi con 104 pasajeros -entre españoles, extranjeros residentes en España y ciudadanos de la UE- e hizo una escala en Goa, donde se embarcaron otras 186 personas antes de tomar rumbo a Madrid.
Del total de pasajeros, un 10% aproximadamente son ciudadanos de la UE no españoles, y el otro 90%, unos 250-260, turistas españoles.
Contentos y aliviados por dejar atrás los problemas que han tenido en India desde el inicio de la pandemia, primero por la incertidumbre de cuándo y cómo regresar ante la cancelación de vuelos y en los últimos días especialmente por la falta de abastecimiento y del cierre de comercios.
Antes de partir las autoridades indias les han tomado la temperatura y les han recomendado lavarse las manos y ponerse mascarilla -que portaban todos a su llegada- si bien no les han realizado ningún test.
Los españoles no tendrán que someterse a una cuarentena de 14 días por haber llegado de India sino que directamente viajarán ahora a sus domicilios a confinarse como el resto de la población.
"La embajada ha movido los hilos"
"Lo importante es que ya estamos aquí", ha contado una mujer a su llegada a la T4 de Barajas, terminal completamente vacía y sin personas esperando viajeros por el confinamiento decretado por el Gobierno.
Esta turista española ha explicado lo "complicado y caro" que ha resultado salir de India, algo que finalmente ha sido posible porque "la embajada ha movido los hilos".
Ahora espera viajar a Valencia. "No se si podré regresar, me he sacado un ticket de AVE y voy a Atocha a ver qué pasa", ha añadido.
En la misma situación están otras dos españolas de Zaragoza que no saben cómo está el transporte y si podrán llegar a sus casas en taxi o autobús.
"Lo más complicado allí era comer"
Visiblemente cansadas por el vuelo, han relatado que "lo más complicado allí era comer". "Lo llevábamos como podíamos y donde estábamos no había tiendas abiertas", han señalado las mujeres, que creen que hay españoles que se han quedado por decisión personal.
Pese al cansancio, todos estaban contentos por regresar, especialmente tras la odisea de algunos para alcanzar Delhi o Goa, donde estaban los aeropuertos.
Es el caso de un trabajador gaditano que estaba en el norte del país junto a otras 35 personas montando un parque eólico. "Hemos viajado 15 horas en un autobús, luego el segundo día otras ocho horas, con muchos controles antes de llegar a Goa, todo ha sido un poco complicado y también un poco difícil contactar con la embajada", ha explicado.
Ahora alquilará un coche para poner rumbo a Jerez y encerrarse en casa pero, como ha dicho: "Por lo menos estoy con mi familia".
La situación de estos turistas contrasta con la de otro español de Vitoria, quien ha confesado que "estaba de maravilla en la India".
"Yo vivía muy tranquilo, vivía en la montaña cerca de la playa, salía a ver el amanecer, andar por la selva. Estoy contento de estar aquí, pero allí me sentía libre, aquí viendo lo que hay, no sé...", ha dicho este turista, que ahora cogerá un vuelo a Bilbao y de allí un autobús para ir a Vitoria.
De hecho ha asegurado que le ha dado "pena volver", pero que lo ha hecho porque le decían que era el único vuelo de repatriación y su visado vencía en un mes, si bien todo ha sido "fácil" en India.
"India nos ha cuidado", ha destacado.