La familia de Antonio sigue rota por el dolor de su asesinato en Pan Bendito (Carabanchel). Aún no han sido detenidos los dos principales sospechosos que huyeron a las pocas horas: 'El Bola' y su padre 'Perico'. Uno de los primos de la víctima, fue el encargado de llevarle al hospital donde murió a consecuencia de los disparos que sufrió. En una entrevista a Vozpópuli detalla cómo sucedió todo y las amenazas de muerte que llevaban meses sufriendo desde hace meses.
La tensión entre ambas familias explotó la madrugada del pasado 17 de julio pero las rencillas se iniciaron seis meses atrás. Todo por un cigarro a las puertas de una discoteca. Según relata uno de los primos de la víctima, 'El Bola', en situación de embriaguez, pidió tabaco a un menor de su familia. "No tengo", le respondió el chico.
"No voy a descansar hasta matarlo"
Al ver la situación sus amigos se acercaron para ver qué pasaba y 'El Bola' les amenazó con "pegarles un tiro". Ese fue el comienzo de una reyerta donde este hombre sufrió varias lesiones. "Cada vez que veía después al niño le decía que le iba a matar", afirma uno de los primos de Antonio.
El menor recibió mensajes de WhatsApp con estas amenazas de muerte. Se cambiaba el móvil y el acoso prosiguió en redes sociales. "No voy a descansar, no voy a parar", fueron algunas de las consignas que lanzaba presuntamente este hombre. Todas estas pruebas están en manos de los investigadores del Grupo VI de Homicidios de la Policía Nacional que se encargan del caso.
Estas "constantes amenazas" se reproducían cuando se encontraban, de forma fortuita, 'El Bola' con algunos miembros de la familia de Orcasitas. Como se produce en estos casos, un patriarca se desplazó a Pan Bendito para intentar arreglar la situación pero se negaron a recibirle.
'El Bola' intentó dar dos puñaladas a un menor
A principios de verano, las aguas bajaban de forma más tranquila hasta que el 16 de julio volvió a producirse otro 'encontronazo', bastante más grave que los anteriores. Fue en el interior del Centro Comercial Parque Sur de Leganés y más preocupante de lo que se publicó en un principio.
'El Bola' vio a otro de los menores de la familia. Inmediatamente sacó un cuchillo y le intentó dar dos puñaladas que el chico esquivó. Huyó como pudo de las instalaciones y se puso en contacto con su padre. "Nuestro hermano vino con la noticia y decidimos ir a hablar con ellos para que cesaran las amenazas", explica su primo.
Antes de llegar a Pan Bendito incluso mandaron mensajes para avisar a la Policía Nacional si se producía alguna pelea. "Cuando llegamos como no sabíamos donde vivían gritamos que bajara Perico. El padre de 'El Bola' se asomó tras un rato por la ventana del primer piso y dijo que no iba a bajar. Después se escondió y a los tres segundos se efectuaron doce tiros", recuerda.
Los autores del asesinato huyeron en un BMW
La familia de Orcasitas se refugió como pudo de los disparos pero Antonio recibió varios tiros por la espalda. Al ver a su primo herido lo metió en su coche. "No te duermas", le decía su hijo en la parte de atrás del vehículo. Llegaron al hospital 12 de Octubre en dos minutos. Se llegaron a cruzar con la Policía que acudía al lugar. Al poco de llegar al centro sanitario murió.
"Se nos murió en las manos", recuerda su primo afligido. A los pocos minutos la Policía Nacional accedió al piso desde donde se habían efectuado los disparos. Los presuntos autores no estaban. El familiar de Antonio subraya que fueron cobijados en un piso okupado que tienen alquilado a una pareja en el mismo edificio. Los agentes permanecieron custodiando la zona hasta las dos de la mañana. En torno a las seis de la mañana se fugaron en un BMW X5 que tenían.
Ocultos en España
'El Bola' y su padre tienen familia por diferentes puntos de España, concretamente en Barcelona y Sevilla. "Están ocultos pero no han salido del país", explica. La familia de Antonio está rota por la pérdida de su familiar y pide justicia. No quieren venganza. "Que los encuentren y que caiga sobre ellos el peso de la ley", añade.
Han presentado a los investigadores del Grupo VI de Homicidios todas las pruebas que disponen para que se resuelva el caso. También han contratado los servicios del abogado Marcos García-Montes. "Todavía no nos creemos que Antonio no esté", explica. La víctima tenía cuatro hijos, el más mayor de 19 años. En camino estaba su primer nieto. Quien más afectado está por su homicidio es su mujer. "Estamos rotos", asegura mientras esperan que pronto puedan detenerse los autores del asesinato.
Manchego no nacionalista.
La ficción hecha realidad, todo se parece a las novelas de Mario Escobar donde Adela Palazuelo, que es inspectora gitana, desarrolla sus aventuras en Pan Bendito.