A menos de un mes para que se celebre la próxima edición del Mad Cool la polémica sigue haciendo sombra al festival de música, programado del 10 al 13 de julio en Villaverde. A pesar de los esfuerzos por mejorar las condiciones tras la polémica del año pasado, aún no se ha aprobado un plan de movilidad adecuado, generando incertidumbre entre los asistentes y un cruce de declaraciones entre autoridades. En este sentido, el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha manifestado su frustración con el Delegado del Gobierno, Francisco Martín, acusándolo de "colapsar" al exigirle que trabajara en la validación del plan de movilidad necesario para otorgar la licencia al evento.
"El promotor ha entregado un plan de movilidad al Ayuntamiento de Madrid porque es preceptivo, tal y como establece la ordenanza. Ese plan de movilidad afecta a la M-45, que es gestionada por Guardia Civil y, por tanto, por Delegación de Gobierno. El año pasado se manifestó que había problemas de movilidad y lo que hemos dicho es que ese plan tiene que estar validado por la Delegación del Gobierno, que tiene competencias en el ámbito de la movilidad a través de la gestión de la M-45", explicó Carabante.
La respuesta de la Delegación del Gobierno: "No es nuestra competencia"
La respuesta de la Delegación del Gobierno en Madrid no se hizo esperar. Desde su oficina, aclararon que no es competencia del organismo estatal validar ningún permiso de movilidad relacionado con el festival Mad Cool. Este cruce de responsabilidades ha puesto en jaque la organización del evento, dejando a miles de asistentes potenciales en una situación de incertidumbre.
Carabante recordó este miércoles, tras reunirse con una delegación de la ciudad china de Shenzen, que "en el pasado el Delegado del Gobierno requirió al Ayuntamiento de Madrid la suspensión de un concierto porque entendía que la ubicación de Mad Cool no era la más idónea por las condiciones de movilidad y de seguridad".
El Mad Cool 2024, con un plan de movilidad pendiente de aprobación
El Ayuntamiento de Madrid asegura que tiene "prácticamente todos los informes y permisos" para otorgar la licencia al festival, a excepción del plan de movilidad, que aún espera el visto bueno de la Delegación del Gobierno. Este plan es crucial, ya que afecta directamente a la M-45, una arteria gestionada por la Guardia Civil y, por ende, bajo la jurisdicción de la Delegación del Gobierno.
Borja Carabante ha enfatizado que "ese plan de movilidad afecta a la M-45, gestionada por la Guardia Civil, que depende de la Delegación del Gobierno. Por tanto, el plan de movilidad no estaría completo si no contáramos con ese beneplácito de la Delegación del Gobierno".
Hay que tener en cuenta que a pesar de las mejoras que se están intentando hacer desde la organización del festival, los asistentes continúan molestos por las iniciativas de la promotora. El hecho de que se cobre entrada a los medios de comunicación por cubrir los conciertos no ha hecho más que avivar la tensión con la organización del festival. En concreto, 30 euros por la entrada completa de tres días y, por día individual, 15 euros, eso sí, destinado a diversas asociaciones a modo de 'Charity'.
A pesar de la tensión entre delegados por conseguir un plan de movilidad que evite el caos del año pasado, se siguen mantienendo reuniones técnicas entre el Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno. Carabante subrayó la necesidad de que estas reuniones sean estrictamente técnicas, evitando la politización del proceso.
Problemas de Mad Cool 2023 y soluciones propuestas
Uno de los problemas principales del año pasado fue la insuficiencia de tornos para el acceso y la salida del festival. Según Carabante, este año se ha trabajado en duplicar casi el número de tornos, además de reducir la cantidad de asistentes previstos para mejorar la fluidez.
"También se han reducido las personas que van a acudir y, por tanto, creo que ese incremento de los tornos y de las frecuencias, el refuerzo de Cercanías junto a la colaboración de Policía Nacional, Policía Municipal y Guardia Civil (conforman) un plan de movilidad que va a permitir que esa ubicación sí sea buena para celebrar Mad Cool", declaró el delegado de Urbanismo.
A pesar de las complicaciones, Carabante ha querido enviar un mensaje de tranquilidad a quienes ya han adquirido sus entradas para Mad Cool 2024. "Las personas que han comprado la entrada tienen que estar tranquilas porque hay un plan de movilidad adecuado que va a permitir solucionar los problemas que el año pasado surgieron y que dio causa a que la Delegación del Gobierno se pronunciara", afirmó. Respecto a la posibilidad de un recinto alternativo, Carabante no cree que sea necesario, ya que las mejoras solicitadas el año pasado por la Delegación del Gobierno se han implementado.
El delegado de Urbanismo también se refirió a las quejas del año pasado de la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, quien criticó la ubicación del festival. Carabante destacó la contradicción en las quejas, señalando que Getafe acogerá el Music Experience, otro evento musical de gran envergadura.
"Me gustaría saber qué medidas va a adoptar el Ayuntamiento de Getafe para que esos ruidos no molesten a los vecinos porque no puede ser que unos conciertos molesten y otros no", comentó Carabante. El Ayuntamiento de Madrid, según Carabante, realiza informes técnicos para minimizar el impacto del ruido de eventos como Mad Cool, considerados de especial singularidad para la ciudad. En estos informes se establecen límites de ruido que pueden ser superados hasta ciertos niveles. Carabante mencionó que Francisco Martín ya había iniciado reuniones con la alcaldesa de Getafe para discutir posibles medidas para minimizar las molestias causadas por el ruido y la movilidad.
