Cientos de turistas han expresado en los últimos días su protesta en las puertas del Palacio Real cuando han encontrado cerradas las instalaciones al ir a visitar uno de los espacios más interesantes de Madrid.
En algunos casos los ciudadanos ya venían enfadados del Parque de El Retiro, también cerrado por culpa del árbol que mató a un niño de cuatro años y las constantes revisiones del Ayuntamiento de Madrid.
Es decir, dos de las ‘atracciones’ turísticas más interesantes para los miles de visitantes que acuden a la capital de España están cerradas cuando el turismo se ha convertido en uno de los motores de la economía madrileña.
El Palacio Real es el tercer lugar más visitado de la ciudad. Cada año un millón de personas acude a ver sus salas e incluso su cocina, uno de los puntos abiertos recientemente al público.
17 días cerrado
La primera sorpresa se la llevan los visitantes que quieren comprar entradas por Internet. Este mes, según pudo comprobar este periódico, han estado bloqueados 17 días de forma total o parcial.
Las disculpas son múltiples. Desde el relevo de la guardia, por la ocupación del patio de la Armería, a la presentación de cartas credenciales.
Pero hay otros acontecimientos como el World Opera Fórum, de carácter privado, que han cerrado las instalaciones a cientos de turistas.
Otras de las disculpas son la vista de Estado del presidente de la República de Portugal o el almuerzo organizado con ocasión de la entrega del Premio Miguel de Cervantes.
Se desconoce la razón
Del 9 al 21 de abril el calendario para comprar entradas por Internet informa que el Palacio Real estará cerrado totalmente sin explicar en ningún caso la razón.
Fuentes de Patrimonio nacional indicaron que la Ley obliga a poner a disposición de la Jefatura del Estado las instalaciones de Palacio y añadieron que el cierre en algunos días ha sido sólo parcial.
“Patrimonio Nacional, como organismo público responsable de los bienes de titularidad del Estado, -señala su página web-, tiene como fines principales el fundamental apoyo a la Jefatura del Estado para la alta representación que la Constitución y las leyes le atribuyen, así como la puesta a disposición de los ciudadanos del patrimonio histórico-artístico que gestiona a través de su uso con fines culturales, científicos y docentes”.
Esa misma página señala que “la naturaleza diversa de los bienes y la compatibilidad de usos de los mismos hace que la labor de servicio público a la que se debe Patrimonio Nacional sea amplia y compleja”.
Este argumento no convencía a los cientos de turistas decepcionados en los últimos días por esta “absurda situación”, según decía a sus puertas un frustrado visitante.
