Decenas de policías se concentraron la tarde del domingo frente a la sede de la comisaría de Moratalaz en protesta por lo que los agentes consideran “mala gestión” de los responsables policías del dispositivo de la Marcha de la Dignidad, donde hubo un centenar de heridos. Los agentes pidieron la dimisión del comisario de la UIP y del comisario de Seguridad Ciudadana. Igualmente iniciaron una campaña en Internet pidiendo que abandonen sus puestos. Les acusan, entre otras cosas, de proteger la sede del PP y dejar abandonados a un grupo de agentes.
Los sindicatos SUP, Unión Federal de Policía y Sindicato Independiente, así como muchos agentes independientes acudieron a esta protesta que llegó a frenar la salida de las furgonetas con destino al estado Santiago Bernabéu para cubrir el Real Madrid-Barcelona. El SUP explicó que hubo errores “en su dirección y toma de decisiones, ordenando actuar sin los medios adecuados, provocó que los policías asumieran riesgos innecesarios cuyas consecuencias se vieron materializadas en las lesiones que sufrieron, algunas de carácter muy grave”.
El sindicato cree que estos errores de coordinación deben suponer la dimisión del responsable o responsables que permitieron que quince policías quedasen aislados, sin apoyo, impidiendo que intervinieran otros efectivos que solicitaban acudir en su ayuda.
El sindicato no descartó confeccionar un calendario de acciones reivindicativas si no se da respuesta urgente a lo solicitado.
Por su parte, el sindicato CSIT-Unión Profesional de la Policía Municipal de Madrid reclamó medidas para que hechos como los que sucedieron el sábado no vuelvan a repetirse “y los compañeros no se jueguen la vida de forma gratuita”. Recordó que se deben mejorar los medios y el material de las UCES de la Policía Municipal.
Ayer, sus vehículos fueron golpeados y los cascos agujereados por los objetos lanzados por los manifestantes. Tras la marcha de la dignidad se produjeron 101 heridos, de los que un total de 67 eran policías.