Mariano Rajoy no quiere ni oír hablar de corrupción, y achaca su batacazo electoral el pasado 24M fundamentalmente a la crisis. "Hemos tenido que tomar decisiones que no eran fáciles, pero creo que hicimos lo que teníamos que hacer. Los acontecimientos a los que usted se ha referido -en relación a los casos Bárcenas, Gürtel, tarjetas Black, etc- también han tenido coste político, pero creo que ha pesado más la crisis, y luego la corrupción. Ambas le han hecho mucho daño al PP. El partido tiene su responsabilidad, hemos tomado decisiones, las personas implicadas ya no son miembros del PP y hemos introducido modificaciones legislativas en el Congreso para evitar que se vuelva a repetir en el futuro", ha contestado el presidente del Gobierno en una entrevista en Cadena Cope.
Rajoy ha recordado que uno de los casos de corrupción más lamentable es el de los ERE de Andalucía y los cursos de formación, algo en lo que cree que su partido ha sido muy combativo. Sin embargo, "no es bueno estar tirándose esto a la cabeza, hay que sancionar los que se hayan producido y mirar hacia adelante para que no se vuelvan a repetir".
"No vamos a entrar exactamente en lo que decíamos en el programa. Es un tema conflictivo", dice Rajoy sobre su promesa de reformar la ley del aborto
El presidente del Gobierno, quien no sabe cuándo van a ser las elecciones porque "no es un tema capital", afirma que intentará recuperar en estos cinco meses el mayor número de votantes perdidos, ya que "nos ha tocado gobernar en una de las etapas más difíciles que yo he conocido". Preguntado sobre las palabras de Aznar de esta semana pidiendo una reacción enérgica, creible y suficiente, Rajoy comentaba que "a mí lo que me tiene que dar tiempo es a completar nuestra labor de gobierno y luego a explicarla y a ponernos en marcha para que la gente trabaje con intensidad. Este viernes presentaremos el techo de gasto para el año que viene, y el objetivo seguirá siendo controlar las cuentas públicas. Eso es lo que me preocupa, de lo demás no voy a hacer ningún comentario", sentenciaba.
Rajoy también aseguraba que no se siente cuestionado porque tiene "el apoyo de una gran mayoría del partido y estoy muy cómodo en esta situación, no tengo muchos enemigos", y señala que se sabe objeto de críticas, "normal porque si estuviera en mi casa nadie me criticaría. Hay que escucharlas, entenderlas, y en la vida se aprende de todo, lo bueno y lo malo".
Al ser preguntado por una oyente sobre por qué el Gobierno decidió retirar la promesa electoral de modificar la ley del aborto, Rajoy respondía que "no vamos a entrar exactamente en lo que decíamos en el programa. Pensamos que no era bueno introducir otro asunto de división en la sociedad española. Es un tema conflictivo", recordaba.
Sobre los datos de paro que se conocerán el día 2 de julio, Rajoy afirmaba que en su opinión van a ser buenos, aunque "no es suficiente". "Estuvimos casi 7 años seguidos destruyendo empleo... por eso es muy importante que perseveremos en la creación de puestos de trabajo. [...] Podemos llegar a que haya 20 millones de personas trabajando. Crear empleo es el gran objetivo", reiteraba una vez más.