La Guardia Civil también renueva 'su fondo de armario'. El Ministerio del Interior ha aprobado ya un gasto de 72.592 euros para la adquisición de una partida de 1.818 "sombreros negros", los conocidos como tricornios, para los agentes del Instituto armado. El contrato ha sido adjudicado a Manufacturas Moya, una empresa especializada en la confección de uniformes para cuerpos policiales y ejércitos, la cual tuvo que rebajar el precio de su oferta de los 32 euros iniciales por unidad a los 27 euros, ambos sin Iva.
Así aparece recogido en el acta con el que la Dirección General de la Guardia Civil aprobaba recientemente el gasto y al que ha tenido acceso Vozpópuli. En el mismo se detalla que el concurso fue negociado "sin publicidad" y que al mismo fueron invitadas cuatro empresas. De ellas, sólo dos decidieron aceptar presentar ofertas. Ambas, sin embargo, lo hicieron con precios por encima del máximo previsto por el Ministerio para dicha compra, por lo que el órgano de contratación negoció con ambos una rebaja de los importes.
Finalmente, Interior adjudicó el contrato por ser "la oferta más ventajosa" a Manufacturas Moya, quien redujo el precio inicial por tricornio en cinco euros por unidad, además de ofrecer un aumento de la garantía de 12 meses a los dos años fijados en el pliego de condiciones del concurso. La otra compañía sólo aceptó reducir en 10 céntimos su oferta inicial y su precio final quedó 1,5 euros por "sombrero negro" superior al de su competidora.
Sombrero para actos oficiales
El tricornio fue instaruado como prensa de cabeza para los miembros de la Guardia Civil en 1844, aunque su uso dejó de ser habitual durante el mandato de Luis Roldán, quien lo sustituyó por la conocida como 'teresiana', recientemente también eliminada. Desde entonces, el característico sombrero ha sido utilizado únicamente en actos oficiales y para los llamados servicios "de puertas" que prestan los agentes destinados a la custodia de edificios oficiales y de los propios acuartelamientos del cuerpo policial.