El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, y la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, han pasado la tarde de este jueves en la playa de Zahara de los Atunes, en la provincia de Cádiz. Los políticos socialistas, que son pareja desde hace más de un año, han paseado por la playa acompañados por sus escoltas.
El ministro, que fue elegido diputado por la provincia de Cádiz, no tiene, según su agenda oficial, ningún acto hasta el próximo Consejo de ministros, que se celebrará el martes 14 de julio. Ese mismo día Batet tendrá que estar en Madrid para presidir los plenos del Congreso, que se retomarán el martes y el miércoles tras la inactividad de esta semana.
Campo no ha sido visto en ningún acto oficial desde que el pasado martes compareciese en rueda de prensa tras el Consejo de ministros
La presencia de políticos socialistas en las playas gaditanas no es algo anormal durante los meses de verano, pero sorprende que un ministro pase la tarde de un jueves de principios de julio en la playa en lugar de estar trabajando, sobre todo teniendo en cuenta que el presidente del Gobierno acaba de anunciar una reforma de la Constitución para limitar la inviolabilidad del Rey. De hecho, Campo no ha sido visto en ningún acto oficial desde que el pasado martes compareciese en rueda de prensa tras el Consejo de ministros.
El ministro de Justicia, de 58 años, está divorciado y tiene dos hijas. Por su parte, Batet, de 47, estuvo casada con el exsecretario de Estado de Cultura José María Lassalle, con el que tiene otras dos hijas.