“Con el posicionamiento de la CUP puede haber dado por terminado un ciclo que puede conllevar anteponer la práctica combativa a la institucional o, cuando menos, combinar estratégicamente las dos”. Esta advertencia viene recogida en un reciente informe reservado elaborado por la Comisaría General de Información de los Mossos d’Esquadra en el que advierten del riesgo de un incremento de la tensión por parte de elementos del "Independentismo Revolucionario (IR)".
El cuerpo autonómico alerta del riesgo de que estos elementos fuertemente radicalizados hagan valer la ascendencia que tienen entre los CDR y acaben por fagocitar parte del movimiento. Como algunos escenarios de futuro, los expertos policiales contemplan la convocatoria de huelgas generales en las que “el IR, posiblemente cobijado en los CDR que controle, participará activamente provocando acciones (cortes de vía, enfrentamientos con las fuerzas policiales, derroche de mobiliario urbano, etc) que pueden ser más subidas de tono que las del pasado 8 de noviembre”.
Este documento, al que ha tenido acceso Vozpópuli, fue elaborado después de la fallida investidura del ahora encarcelado Jordi Turull. “Dejaron la República abandonada en la calle”, le espetó el portavoz de la CUP en el Pleno del Parlament, Carles Riera, a los representantes de ERC y JxCat antes de dar por finiquitado el procés y romper la alianza independentista. Precisamente este martes, Riera y su compañera María Sirvent se reunieron en Berlín (Alemania) con Puigdemont para transmitirle su voluntad de "hacerle presidente" pese a su situación judicial. ERC y JxCat apuestan ya por la candidatura de Jordi Sànchez.
"Desobediencia ciudadana"
“Así pues, la CUP -dice el texto- reafirmó su espíritu revolucionario al afirmar que había que poner sobre la mesa, a partir de ahora, la práctica de la desobediencia institucional y ciudadana ante los poderes políticos y judiciales españoles”. A juicio de los Mossos, eso abre un escenario de incertidumbre. El informe explica que “este posicionamiento puede suponer un cambio de estrategia respecto la actitud que el independentismo revolucionario ha mantenido desde septiembre de 2012, fecha aproximada de la génesis del llamado proceso soberanista”.
“En estos 5 años y pico, el IR ha antepuesto la lucha institucional abanderada por la CUP en la práctica combativa, con la intención de no perjudicar sus propias expectativas, crecer institucionalmente, estructurar y territorializar su espectro ideológico y, a la vez, ganar simpatías ciudadanas”, explica.
En ese sentido, los Mossos advierten en su análisis que “la contundencia del IR en las próximas semanas se medirá e irá ligada a factores estructurales como la entrada en prisión los próximos meses de más líderes independentistas que actualmente estén en libertad o fuera de España; al inicio de los juicios antes de finales de año; al perfil del candidato que finalmente será presidente de la Generalidad; la posibilidad de celebración de nuevas elecciones al Parlament el próximo julio, etc”.
'Operación Redes'
Esa contundencia que dice el documento se demostró tras el procesamiento de los líderes independentistas por parte del Tribunal Supremo y la detención en Alemania del expresident Carles Puigdemont. Los Comités de Defensa de la República (CDR) incrementaron sus acciones con el corte de carreteras, liberalización de peajes, intentos de sabotaje a las líneas férreas, presiones a los jueces, enfrentamientos con la policía… La Policía autonómica advierte en su informe que, “genéricamente y antes del verano, el aumentará su presencia en la calle y incrementará la contundencia de sus movilizaciones”.
Estos grupos, creados a imagen y semejanza de los comités que velan por la ortodoxia de la revolución en Cuba, experimentaron este martes sus primeras detenciones tras meses de actuaciones sin apenas oposición por parte de las fuerzas de seguridad. La Guardia Civil, a instancias de la Audiencia Nacional, procedió al arresto de una mujer en Viladecans, Tamara Carrasco García, acusada de los presuntos delitos de terrorismo y rebelión por su participación en los sabotajes de Semana Santa. Fue trasladada las dependencias de la Guardia Civil en Madrid donde permanecerá hasta pasar a disposición judicial.
La denominada operación Redes por la Guardia Civil estaba dirigida también contra otra persona que, por el momento, no ha sido localizada. Por su parte, los Mossos d’Esquadra procedieron también al arresto de seis personas más por presuntos delitos de atentado a los agentes, desobediencia y desórdenes públicos en las protestas del 30 de enero en el Parque de la Ciutadella de Barcelona. Horas después fueron puestos en libertad provisional.