El tenista español Rafa Nadal ha reconocido que en la recta final de la temporada pasada encaró algunos partidos "con menos pasión de lo habitual", algo que considera "normal" teniendo en cuenta que se encontraba "más cansado que de costumbre", según ha explicado en Melbourne antes del Abierto de Australia.
"El año pasado jugué algunos partidos a final de temporada con menos pasión de lo habitual. No es ninguna locura. Eso ocurre cuando estás un poco más cansado. El parte de la profesión", señaló en rueda de prensa un Nadal que dijo haber pasado página: "Ahora estoy en Australia con mucha motivación, con mucha pasión".
De cara al primer 'Grand Slam' del curso, donde debutará frente a Alex Kuznetsov, el balear aseguró que estará "luchando en todo momento para intentar competir contra cualquiera" y contar con "opciones de victoria", para lo cual necesitará "mejorar algunas cosas" en su juego.
Uno de esos teóricos rivales es el número uno mundial, a quien Nadal alabó. "Novak (Djokovic) es el mejor porque el año pasado hizo un año fantástico. Es el número uno y se lo merece", opinó sobre el balcánico, a quien solo se podría medir en la final.
En otro orden de cosas, el número dos del ranking ATP explicó que su nueva raqueta, un poco más pesada que la anterior, puede ser "una cosa positiva" para ayudarle a "mejorar algunos aspectos" de su juego, como ya comprobó con las "buenas sensaciones" que su nueva herramienta le dejó en el torneo de Doha.
Por último, Nadal se confesó hastiado por su batalla contra la ATP por el diseño de la temporada. "Soy el que ha hablado del calendario, he hablado mucho de la Copa Davis, del problema con el US Open... Siempre soy el que está hablando de que las cosas deben cambiar. Pierdo tiempo y energía", lamentó.