La tripulación del portaaviones "Juan Carlos I", buque insignia de las Fuerzas Armadas, ha participado en varias misiones de envergadura. Los militares que viajen a bordo han combatido a los piratas en aguas de Somalia y han tomado parte en rescates en aguas del Mediterráneo. Pero lo que seguramente no esperaban es que su batalla más extraña se iba a librar lejos de alta mar. Porque el problema lo tienen en tierra firme. El Ayuntamiento de Guecho (País Vasco) ha aprobado, con los votos de PNV, PSOE, Podemos y Bildu, una declaración contra la presencia del barco en el puerto de la localidad, donde atracará en los próximos días.
El buque llamado como el rey emérito, una ciudad flotante con capacidad para 1.500 personas, partió la pasada semana del puerto de Rota con 350 tripulantes para participar en unas maniobras que se celebran estos días en aguas del Cantábrico. Concretamente, se trata de unos ejercicios de simulación en los que también participa la fragata "Cristóbal Colón". Esta misión simulada lleva por nombre SIRIO-19, donde, según informa el Ministerio de Defensa, se reproduce "en un escenario ficticio en el que la situación política y militar entre dos países, Nordia e Iberness, evoluciona desde la crisis hasta el conflicto".
Una ambientación que permitirá llevar a cabo el adiestramiento de "una gran variedad de misiones y operaciones, algunas de las cuales no se habían ejercitado con anterioridad en territorio nacional". Además de las misiones de defensa del espacio aéreo nacional, se realizará una operación de evacuación de no combatientes (NEO).
Abierto para las visitas... y vigilado
Lo previsto es que el portaaviones atraque en el puerto de Guecho entre los días 22 y 24 de marzo (viernes y domingo próximos). Incluso, el barco estará abierto para las visitas de los ciudadanos el sábado día 23 en horario de 10:00 a 18:30 horas y el domingo día 24 en horario de 10:00 a 13:30 horas. Unas visitas para las que Defensa va a establecer estrictos controles de seguridad.
Dichos controles se van a establecer, amén de por los motivos de seguridad habituales, porque no está del todo claro cómo será el recibimiento de los habitantes al buque después de lo que sucedió el pasado viernes en el Consistorio de Guecho. El gobierno municipal, de PNV y PSOE, aprobó, con el apoyo de Podemos y Bildu y con la oposición de PP y Ciudadanos, una declaración "antibelicista" contra la presencia del buque.
Tal y como desveló El Correo, la declaración decía así: "La Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Guecho hace pública su disconformidad con la presencia de buques de guerra en Guecho". Se trata de una declaración simbólica y sin consecuencias para los planes previstos por Defensa. Ahora resta por ver cómo reaccionan los vecinos, si con visitas al buque o con algún tipo de protesta en línea con la mayoría del Consistorio.
Así es el buque
Tal y como informa el Ministerio de Defensa, el “Juan Carlos I”, con sus más de 27.000 toneladas de desplazamiento y 232 metros de eslora, es el mayor buque de guerra jamás construido en España. Toma su nombre del rey Juan Carlos I, en consonancia con la tradición de la Armada de asignar a uno de sus buques principales el nombre propio del monarca reinante. Se construyó en el astillero de Navantia en Ferrol, fue botado el 10 de marzo de 2008 y entregado a la Armada el 30 de septiembre de 2010.
El buque “Juan Carlos I” es “una unidad tecnológicamente muy avanzada, interoperable, versátil y adiestrada, la cual puede actuar con garantías de éxito en escenarios muy variados”. Defensa destaca asimismo que “está diseñado y construido íntegramente en España, por lo que se trata de una muestra más de las capacidades alcanzadas por nuestra industria de Defensa y redunda en su prestigio fuera de nuestras fronteras”.
Más en concreto, se trata de un buque multipropósito que, con varios perfiles de misión, “proporciona una gran capacidad anfibia y aeronaval, así como de transporte estratégico y asistencia humanitaria”. Igualmente, el ministerio dirigido por Margarita Robles destaca “su notable capacidad de carga de personal, vehículos, aeronaves y embarcaciones, así como su novedoso sistema de propulsión eléctrico”.