El PP era el partido 'preferido' de la trama Púnica, pero no el único. Las intervenciones telefónicas recogidas en el sumario que instruye el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, Eloy Velasco, desvelan que los principales cabecillas de la red de corrupción no tenían 'escrúpulos ideológicos' a la hora de intentar hacer negocios y miraban a todo el arco parlamentario e, incluso, fuera del mismo. En uno de esos 'pinchazos', un directivo de la empresa Cofely-GDF Suez imputado por amañar concursos públicos recibe el ofrecimiento de su interlocutor para presentarle a "la gente de Podemos", con la que asegura tener relaciones. Las escuchas también revelan tratos para hacer un 'favor' a un sindicalista de CCOO y así "ganar puntos" en el sindicalismo, además de citas con miembros de IU.
Los directivos de Cofely bromean por la insistencia de un miembro de IU para que se reúnan con la alcaldesa de Fuentidueña del Tajo, un municipio de la que califican "la zona roja"
La mención a la formación de Pablo Iglesias se produce en una llamada telefónica que dos imputados mantienen el 19 de septiembre de 2014, cuando este partido aún estaba lejos de alcanzar el poder autonómico y municipal que consiguió en las elecciones del pasado 24 de mayo. Sin embargo, en aquel momento, Podemos era ya la 'estrella' del panorama político tras su éxito en los comicios al Parlamento europeo de unos meses antes y el auge que le auguraban las diferentes encuestas. Uno de los interlocutores de dicha llamada es Pedro García Pérez, director de Mercado Público de Cofely-GDF Suez y considerado el principal muñidor del supuesto fraude en la adjudicación de millonarios contratos públicos de eficiencia energética. El segundo, su compañero en la empresa Constantino Álvarez de la Cueva, 'Tino', también encausado.
En la misma, este segundo comenta que acaba de comer con una tercera persona llamada "Dionisio" y que ésta tiene mucho interés en conocer a Pedro García entre otros motivos porque "les puede ayudar de cara al futuro" ya que "tiene relaciones con la gente de Podemos", sin especificar ningún nombre. El tal 'Dionisio' también dice tener contactos con sindicalistas y, en concreto, con "un tío de Comisiones [Obreras] que está en la Petroquímica de Badalona, que es extremeño y que se quiere volver a su tierra". Pedro García, que en esos momentos está cerrando precisamente la supuesta adjudicación irregular de un contrato en un consistorio de esta región, el de Almendralejo, le dice que podrían hacerle dicho favor sin ningún problema. Una respuesta que provoca la respuesta de Tino: "Sería una buena jugada para ganarse puntos con el sector de CCOO y con el sector petroquímico".
"La zona roja" de Madrid
En otra conversación entre ambos interlocutores, en este caso el 9 de octubre pasado, ambos hablan de un encuentro que al día siguiente va a tener Pedro García "con los de Izquierda Unida" en un restaurante de la calle Antonio López de Madrid, en el madrileño barrio de Usera. Ésta no es, de hecho, la única alusión a encuentros con miembros de esta formación. Cuatro días más tarde, el 13 de octubre, el directivo de Cofely vuelve a comentar un contacto con integrantes de IU. En este caso, le asegura que ha recibido una llamada de alguien de este partido con el que se han encontrado días antes, y que en la misma les ha dado fecha para un encuentro con la alcaldesa de este formación en Fuentidueña del Tajo, un municipio de 2.000 habitantes situado en el extremo sureste de la Comunidad de Madrid.
Pedro: Eso, eso es todo, ya me ha llamado el de Izquierda Unida. El martes 21 [una semana antes de las detenciones] ya me tiene organizada una reunión con la alcaldesa de Fuentidueña (risas)
Tino: Sí, estaba muy interesado el tío con Fuentidueña el otro día (risas).
P: Sí, sí, sí
T: (Risas) ¿Dónde está eso?
P: Pues eso está ahí, pues por Arganda y por Morata y...
T: Ya, ya, zona roja.
P: Y toda esa zona roja.
T: La zona roja.
P: Pero bueno, es un pueblecito como Torrejón de Velasco [municipio donde la trama se hizo con contratos y el alcalde ha sido detenido]. Vamos a ver.
T: La zona roja.
P: Exacto.
La mayoría de los cargos públicos detenidos en el 'caso Púnica' son del PP, aunque también hay de pequeños partidos independientes y el alcalde socialista de Parla
Las primeras detenciones de la 'Operación Púnica', realizadas pocos días después de estas conversaciones, ya revelaron que, pese a que la inmensa mayoría de los cargos públicos salpicados eran del PP, también había de otros partidos. De hecho, entre los primeros arrestos hubo varios alcaldes de partidos locales, además del regidor socialista de Parla, José María Fraile. Éste está encausado, precisamente, por sus tratos con los imputados de Cofely. Las investigación ha comprobado que en este consistorio los directivos de la multinacional redactaron los pliegos que les permitieron adjudicarse de modo supuestamente irregular un contrato de 66 millones de euros de eficiencia energética.
No obstante, donde más cómodos parecían encontrarse era con administraciones gobernadas por el PP. De hecho, uno de los cabecillas de la trama es Francisco Granados, que fuera secretario general de la formación en Madrid. Sin embargo, uno de los ejemplos más evidentes de esa ligazón entre la trama y los 'populares' son las conversaciones que de nuevo los directivos de Cofely mantienen sobre Cataluña, donde la trama aún no había conseguido penetrar pero en la que tenían interés. En una conversación telefónica que mantiene Pedro García con una compañera de trabajo reconocen que no es fácil hacerlo y que "en los únicos ayuntamientos donde está el PP es (sic) Badalona y Castelldefels". De hecho, llegaron a reunirse con el alcalde del primer municipio, Xavier García Albiol, actual líder de la formación en esta comunidad, en un encuentro que el equipo del político ha reconocido a Vozpópuli recientemente.