Una escuela de sicarios albaneses en Ibiza. Ese era el cometido de un peligroso fugitivo que se había asentado en España para participar en el asesinato de un capo de una mafia rival del narcotráfico. La Policía Nacional ha conseguido detener a este delincuente que estaba considerado como "extremadamente peligroso". Tenía una orden de arresto por la posesión y producción de armas, explosivos y munición en Albania.
Este fugitivo pertenecía a una organización criminal dedicada a la comisión de delitos graves contra las personas y entre sus funciones estaba la de reclutar a los integrantes de la organización, así como instruir sobre el modo en que llevar a cabo los asesinatos. La investigación en España arrancó tras ser detectado por los agentes por su vinculación a una banda de narcos.
Había viajado a nuestro país para planear el asesinato de un compatriota de una banda rival. Estaba considerado extremadamente peligroso, según ha informado este jueves la Policía Nacional en una nota de prensa.
La escuela de sicarios
Según las informaciones que obtuvieron los agentes, el papel del prófugo consistía en ser el contacto directo del financiador y trasmitir los encargos que este le ordenaba a la organización criminal así como los medios económicos. Ya tenía todo bajo control para efectuar sus acciones delictivas.
La función principal en la estructura criminal era reclutar a nuevos integrantes, asignar las misiones que correspondía a cada uno de ellos, instruir sobre cómo llevar a cabo asesinatos y dar instrucciones sobre cómo localizar a los objetivos que les encargaban. Las indagaciones llevadas a cabo por los agentes sobre el entorno más cercano al profesor de sicarios permitieron averiguar que se encontraba en la isla de Ibiza donde fue finalmente localizado y detenido.