La Policía Nacional ha tenido que hacer uso este sábado de una pistola táser para reducir a un peligroso delincuente de Huesca, según informan fuentes policiales a Vozpópuli. Este individuo que antaño fue boxeador semiprofesional se mostró violento con los agentes en un evidente estado de embriaguez y los funcionarios tuvieron que hacer uso de esta herramienta para poder detenerle.
El suceso se ha producido este mismo sábado en la calle Luis Mur Ventura. En concreto, en el Bar Racal. Los agentes se desplazaron a la zona para intervenir en un aviso que alertaba de la pelea en las inmediaciones de dos borrachos, según estas mismas fuentes.
Cuando llegaron al lugar, los agentes identificaron a uno de los implicados. Era un ex boxeador que antaño fue semiprofesional. A este varón le conocían de sobra por sus dotes pugilísticas. Es reincidente en este tipo de hechos e iba en estado de embriaguez.
Los agentes de la Policía Nacional le solicitaron en varias ocasiones que depusiera su actitud para ser detenido. Sin embargo no aceptó los requerimientos de los funcionarios que le pedían que se tirara al suelo para tener una intervención segura. Ante esta actitud, y para salvaguardar su integridad, los policías tuvieron que hacer uso de la pistola táser. Este ex boxeador con anterioridad había arremetido al menos dos ocasiones contra los efectivos de seguridad.
El uso de pistola táser para reducir delincuentes violentos está cada vez más extendido entre los diferentes cuerpos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Una muestra de ello es que, esta semana, la Policía Nacional formalizó el pasado mes de diciembre un nuevo contrato para adquirir más de un centenar de estas dotaciones.
Desde mediados del 2023, la Policía Nacional ha comenzado a utilizar la pistola táser con mayor regularidad. En un periodo en el que se incrementan las agresiones a los agentes, estos funcionarios llegan a una misma conclusión: hay falta de medios y protocolos para salvaguardar las vidas de los policías. Se da la circunstancia de que los cargadores para este equipamiento también se tiene que contratar. Hace pocos meses, la Policía pagó 341.220 euros a Telefónica por este servicio.