La Policía Nacional avanza en su plan de dotar a la Unidad de Intervención Policial (UIP), más conocidos como antidisturbios, con nuevos medios materiales para el desempeño de sus funciones. Tras la adquisición de nuevos lanzadores del calibre 40 milímetros -que permiten lanzar desde pelotas de goma hasta gases lacrímogenos-, ahora se refuerza con hasta 550 protectores de brazo para los agentes. La batería de adquisiciones coincide con la crisis que se vive en las inmediaciones de la calle Ferraz, con las algaradas y cargas policiales a partir de las protestas contra la ley de amnistía.
Fuentes sindicales manifiestan a este diario su “sorpresa” por la incorporación del nuevo material en este momento, teniendo en cuenta las adquisiciones relacionadas con las protecciones y los lanzadores del calibre 40 milímetros, en un momento en que el principal desafío de los antidisturbios pasa por contener la seguridad en torno a Ferraz; y que, por el contrario, no se llevaran a cabo compras de material en episodios particularmente críticos como los saltos masivos a las vallas de Ceuta y Melilla.
Según ha podido comprobar Vozpópuli, la División Económica y Técnica del Cuerpo Nacional de Policía se ha lanzado al mercado para la compra de al menos 550 protectores de antebrazo y codo, destinados tanto a la UIP como a las Unidades de Prevención y Reacción (UPR), para los que ha reservado un presupuesto cercano a los 70.000 euros.
El objetivo de estos protectores -cada uno dispone de dos unidades, una para cada brazo- es cubrir antebrazos y codos “frente a golpes producidos por puñetazos, patadas, objetos contundentes (palos, piedras, barras metálicas, etc.), e incluso frente a cortes por objetos punzantes (navajas, cuchillos, etc.)”.
Policía en Ferraz
La Policía ha colgado la licitación en la Plataforma de Contratación esta misma semana, coincidiendo con los acontecimientos que se viven en las inmediaciones de la calle Ferraz y que ha puesto a los antidisturbios en el ojo del huracán, con una airada polémica sobre su intervención contra los radicales que revientan las manifestaciones.
Como adelantó este diario, la Policía estrecha el cerco en torno a los principales sospechosos de participar en los disturbios de Ferraz. El análisis de las grabaciones y de las cámaras sirve a los agentes para identificarlos. Este jueves, la Brigada Provincial de Información detuvo en su domicilio a Pablo Lucini, delegado de Democracia Nacional en Madrid.
Las Unidades de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional tienen previsto permanecer su dispositivo en las inmediaciones de Ferraz al menos hasta el puente de la Constitución
Lo cierto es que el Ministerio del Interior ha desplegado en la capital a diversos grupos de la UIP con base en otros puntos de territorio nacional; no sólo por los disturbios en Ferraz, también para reforzar la seguridad en torno al Congreso de los Diputados -coincidiendo con la investidura de Pedro Sánchez- y otros puntos estratégicos. En total se ha alcanzado la cifra de 1.500 antidisturbios, cuando en toda España dispone de una plantilla de 2.400.
Las Unidades de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional tienen previsto permanecer su dispositivo en las inmediaciones de Ferraz al menos hasta el puente de la Constitución, según han informado fuentes de seguridad a este diario. Este operativo cuenta con equipos de fuera de la capital que se irán relevando pero permitirá mantener en Madrid la cifra de 1.500 antidisturbios.
La Policía, no obstante, destaca en la documentación adjunta a la licitación que estas adquisiciones forman parte de un “plan anual para el año 2023”. Y recuerda que estas unidades “en ocasiones deben desenvolverse en ambientes hostiles donde se producen enfrentamientos violentos pudiendo resultar lesionados”.