Las direcciones generales de la Policía y la Guardia Civil reconocerán a los miles de agentes que participaron en la cumbre de la OTAN celebrada en Madrid con un distintivo honorífico en reconocimiento por su labor durante la bautizada como 'Operación Eirene'.
Se trata de un reconocimiento que pasará a figurar como mérito en los expedientes de los agentes y que, por tanto, se puede tener en cuenta para ascensos o promociones, según señalan fuentes de ambos cuerpos dependientes del Ministerio del Interior.
Unos 10.000 agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad --6.500 policías nacionales y 2.400 guardias civiles, a los que se sumó policías municipales y servicios de emergencias-- blindaron la capital en una cita internacional que contó con el mayor despliegue policial de la historia de España al reunir a más de 40 líderes mundiales en un contexto de máxima tensión por la guerra de Ucrania.
Tras la clausura de la cumbre, el 30 de junio, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, agradeció desde el Centro de Coordinación (CECOR) instalado en Ifema la profesionalidad de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que consiguieron que el cónclave finalizara con "cero incidencias y cero detenidos".
