Los avales que concedía el Gobierno de Francina Armengol para habilitar a una empresa a participar en concursos públicos se procesaban de manera "automática" previa solicitud de la compañía. Al menos así lo ha confirmado el ex subdirector de Compras y Logística del Ib-Salut, Antoni Mascaró, en su comparecencia en la Comisión de investigación por el caso Koldo en el Parlamento balear. Mascaró es uno de los nombres propios más comentado en los últimos días en el ámbito parlamentario, ya que firmó un certificado para Soluciones de gestión -empresa de la trama Koldo- en el que indicaba que se había operado sin ninguna incidencia con la compañía pese a que había traído mascarillas que no se correspondían con lo contratado. Un alto cargo al que el PSOE ha evitado llamar en su Comisión del Congreso.
"Soluciones de gestión ha realizado suministros de manera satisfactoria... sin tener a fecha de hoy ninguna incidencia", apunta el documento firmado por Mascaró en agosto de 2020, dos meses después de saber que esta empresa no había enviado el material que se contrató (envió mascarillas KN95 en lugar de FFP2). En su comparecencia, Mascaró ha venido a eludir cualquier responsabilidad por su parte o por parte del Ejecutivo de Armengol en este aval. "Era un certificado automático", ha llegado a subrayar. Sobre si alguien del Gobierno balear le pidió que emitiera ese documento, que certificaba a Soluciones de gestión como empresa que podía operar en concursos públicos, ha explicado que "todos se solicitaban directamente por parte de las empresas vía correo electrónico". Mascaró ha dado a entender que estos certificados se expedían sin mirar nada.
En su intervención, Mascaró se ha sumado al nuevo relato de Armengol y altos cargos como Manuel Palomino, afirmando que las 1,4 millones de mascarillas comparadas a Soluciones se adquirieron para formar parte de un stock de seguridad para la ciudadanía. Un uso civil que desmienten dos documentos adelantados en exclusiva por Vozpópuli: la resolución del director general del Servicio Balear de Salud del 4 de mayo y el escrito de Palomino advirtiendo a la empresa de la trama Koldo de que se iba a iniciar un proceso de reclamación por incumplimiento de contrato (3 años después y coincidiendo con las elecciones autonómicas).
La comparecencia de Mascaró se contradice con el escrito de Palomino. Según Mascaró, las mascarillas compradas a esta empresa no se repartieron entre los hospitales, al contrario de lo que sostiene el ex director general del Ib-Salut, un argumento clave en su reclamación contra Soluciones de gestión.
Contradicciones con Armengol y Palomino
Uno de los aspectos más llamativos de la intervención de Mascaró ha sido su consideración de que en el momento de gastar 3,7 millones en mascarillas con Soluciones "no faltaban mascarillas para los trabajadores sanitarios". Es más, ha llegado a afirmar que contaban con un stock en este sentido. Entonces, ¿por qué se compraron más mascarillas por la vía de emergencia y con fines sanitarios -como indican los documentos ya mencionados- a la empresa de la trama Koldo? El relato que sostienen ahora Armengol y sus altos cargos vendría a ser la respuesta: eran para uso civil, no sanitario.
Sin embargo, además de que los documentos indican claramente que el fin de estas mascarillas era sanitario, tanto Armengol como Palomino subrayaron en sus intervenciones en la Comisión de investigación del Congreso en que la situación de escasez de material en Baleares era acuciante en el momento de contratar a Soluciones de gestión. La expresidenta balear llegó a decir que el Ministerio de Sanidad le enviaba una cantidad de mascarillas muy inferior a la necesitada. Algo de lo que se quejó en el Consejo Interterritorial.
De la misma manera, Manuel Palomino afirma que en la misteriosa llamada del Ministerio de Transportes ofreciéndole material y el teléfono de Koldo García él aseguró que necesitaban material y les venía bien la ayuda.
Más allá de las contradicciones entre las versiones, Mascaró también ha deslizado un hecho llamativo: "Las mascarillas comparadas a Soluciones de gestión fueron las únicas que integraban el stock de seguridad para la población civil".
Pactasunt
¿Certificados automáticos?...vaya caradura. Está tipa, la Armengol, se quejó de la lentitud de la Administración para reclamar a la empresa suministradora, y en cambió, pago e 6 días, record de prontitud, cuando lo normal es pagar varios meses después. Roban, te insultan y se las dan de honrados.....!¡!vaya caradura!.