Entre llamadas telefónicas y comidas, Manuela Carmena está recibiendo presiones por parte de amigos y afines para que dé el paso definitivo y se presente con Más Madrid el 10-N. Muchos de los que la animan reflexionan sobre lo que pueda ocurrir después de los comicios y apuntan a que, si Más Madrid logra un buen resultado, pueda erigirse como aliado de Pedro Sánchez para un gobierno de centro-izquierda. Con estos últimos, tal y como ha adelantado Vozpópuli, Carmena también ha mantenido reuniones con altos cargos del gobierno en funciones de Sánchez.
Las personas que le aconsejan dar el salto al Congreso forman parte del círculo más estrecho de amigos de la exalcaldesa, afirman fuentes conocedoras de esas conversaciones. Se trata, por ejemplo, de la escritora Almudena Grandes y el novelista y poeta Benjamín Prado, entre otros, además de Marta Higueras, su mano derecha en el Consistorio de la capital, y otros exconcejales de su gobierno entre 2015 y 2019.
Hasta ahora, la exregidora ha apelado a su edad (tiene 75 años) como uno de los elementos que frenan su decisión. Aunque las personas que la alientan en privado destacan que su compromiso puede ser temporal. Es decir, que no haría falta terminar la legislatura de cuatro años para dar el paso.
Cabe destacar que Carmena, además de haber estado hospitalizada dos veces durante su etapa de regidora, también compitió a la campaña electoral de las municipales de mayo advirtiendo de que solo seguiría si revalidaba el control del Palacio de Cibeles. La propia exalcaldesa ha admitido el pasado jueves en una entrevista en Ràdio4 que "amigos y compañeros" de Más Madrid se lo han propuesto, pero ha insistido en su negativa.
Cargo en el ámbito internacional
Para muchas de las personas que se han dirigido a la exregidora, la operación de su candidatura no se limitaría a una entrada efímera en el Congreso. Se trataría más bien de una elaborada estrategia política dirigida, por un lado, a fagocitar parte del electorado de Podemos (y golpear a fondo el liderazgo de Pablo Iglesias). Y por el otro a tender puentes con Sánchez y el PSOE para llegar, si dan los números, a un Ejecutivo que prescinda de los morados.
No es casual que a lo largo de las últimas semanas Carmena se ha ido reuniendo con altos cargos del gobierno en funciones. En esas reuniones, según fuentes socialistas, los emisarios de Sánchez propusieron a Carmena formar parte de las listas electorales del PSOE. La exregidora, sin embargo, rechazó la oferta. Aunque se abrió a la posibilidad de ocupar cargos importantes, como el de ministra o de Defensora del Pueblo. Este último, en teoría prometido a Ángel Gabilondo.
También hay quien apunta a un cargo de prestigio en el ámbito internacional. Carmena siempre ha disfrutado durante su etapa de regidora de la actividad en el tablero mundial. Eran famosas sus misiones en Nueva York o en proyectos que involucraban la ONU. Según las fuentes consultadas, algunos de esos encuentros de la alcaldesa con emisarios y cargos del gobierno se realizaron en el marco del Ministerio de Exteriores.
"Es nuestro momento"
Nadie duda de la fuerza electoral de la exalcaldesa de Madrid. En las últimas municipales, logró algo más de 500.000 votos. Cifras parecidas a lo que obtuvo Unidas Podemos en las generales de abril (unos 600.000 sufragios). El impacto de su candidatura, de hecho, preocupa al núcleo duro de Iglesias, que desde Irene Montero hasta Gloria Elizo, Enrique Santiago o Rafa Mayoral obtuvieron su escaño en la circunscripción de Madrid.
Además de sus amigos, también otros dirigentes de Más Madrid, entre ellos Íñigo Errejón y Tania Sánchez, insisten para lograr el sí definitivo. Los más escépticos apuntan a que, tras la negativa de Carmena, las relaciones con Errejón están rotas. Por eso también hay sectores del partido de Errejón que piden ir más allá. Y plantean el esquema de varias candidaturas con Carmena o sin ella. “Este es nuestro momento, ahora o nunca”, es el refrán que circula en los ambientes de Más Madrid.